Jueza de 72 años nada para salvar su vida
Una jueza argentina de 72 años, que llegó ayer a su país, relató que logró sobrevivir al naufragio del crucero Costa Concordia en el mar Tirreno al saltar del buque y nadar 60 metros hasta la costa de la isla del Giglio (Italia).
“No tenía más remedio que tirarme al mar. Salté con 30 ó 40 personas que nos quedamos sin botes salvavidas”, sostuvo la magistrada María Inés Lona en el aeropuerto internacional de Ezeiza, a las afueras de Buenos Aires.
La jueza llegó al país en un vuelo procedente de Italia junto con sus dos hijas, también pasajeras del crucero. En total fueron 18 los argentinos que se encontraban en el barco y todos se salvaron.
La mujer recordó que un español la ayudó en la decisión de saltar al agua y aseguró que solo llevaba el salvavidas, un tapado y sus zapatos para evitar que las piedras lastimaran sus pies.
Las hijas de Lona, María Silvina y María Valeria Ávalos, una de ellas con discapacidad, lograron subir a un bote y encontraron a su madre a las dos horas, cuando creían que se había ahogado o que estaba en un bote, señaló la pasajera de 72 años.
La jueza, quien comparó la odisea con el hundimiento del Titanic, narró que la primera advertencia sobre lo que ocurría la tuvieron cuando escucharon un golpe fuerte y todo quedó oscuro.
“Nos dijeron que era un problema energético, que no nos hiciéramos problemas, que nos quedáramos en los camarotes. Pero, de repente, sonó la alarma y nos dijeron que había que ir al puente 4, donde estaban los botes. El capitán nunca habló, su actitud fue de terror”, relató. EFE/AFP