Sobrino de líder de las FARC viaja a EE.UU. para delatar a Jesús Santrich
Uno de los detenidos en el caso de Jesús Santrich, el líder del partido FARC que fue capturado por narcotráfico, viajó a Estados Unidos con el fin de colaborar con la justicia y delatar al exguerrillero, informó Caracol Radio este martes 17 de abril.
Se trata de Marlon Marín, sobrino del número dos del partido en que se transformó la antigua guerrilla y cabeza en el Senado, Iván Márquez, cuyo nombre de pila es Luciano Marín, según la emisora, que detalló que ha recibido el estatus de "testigo protegido".
Santrich fue capturado la semana pasada junto con Marín, Armando Gómez, alias "El Doctor" y Fabio Simón Younes Arboleda por la Fiscalía colombiana con base en una circular roja de Interpol a petición de la justicia de EE.UU., que lo acusa de tener un acuerdo para exportar 10 toneladas de cocaína a ese país después de la firma del acuerdo de paz, el 24 de noviembre de 2016.
Según la emisora, Marlon Marín voló en la noche del lunes 16 de abril hacia EE.UU., donde afirmó que "tiene todas las pruebas" que demuestran que Santrich "dirige una organización de narcotráfico en Colombia".
Siempre según la información de Caracol Radio, Marín "está en libertad" al estar considerado como testigo protegido.
La revista Semana desveló en su última edición que Marín también está presuntamente involucrado en otro caso de corrupción a nivel nacional con los recursos dedicados al posconflicto.
Esa publicación desveló que el fiscal general, Néstor Humberto Martínez, envió una carta el pasado 4 de abril al presidente Juan Manuel Santos en la que advirtió sobre esa red.
El grupo contaba "con información privilegiada y complicidad de servidores públicos" para encaminar multimillonarias adjudicaciones a favor de ciertos "empresarios y contratistas, a cambio de beneficios económicos indebidos que se traducen en porcentajes sobre los mismos".
Las primeras interceptaciones de las comunicaciones de Marín son de enero de 2017, cuando le escucharon al intentar conseguir unos contratos relacionados con servicios de salud para exguerrilleros.
Tras ese primer intento que no fructificó, puso el foco en otros negocios como proyectos productivos de avicultura, agricultura, piscicultura e infraestructura de los que obtuvo jugosas coimas, según Semana. (I)