El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, viajará la próxima semana a Cuba para recibir un premio por su defensa de la democracia y los derechos humanos en honor al fallecido disidente Oswaldo Payá, informó este miércoles su portavoz.

Almagro "va a recoger el premio Payá (...) que le dan por su defensa de los derechos humanos y la democracia", dijo escuetamente a la AFP Sergio Jellinek, vocero del secretario general.

En un correo electrónico a AFP, el portavoz de la OEA, Gonzalo Espáriz, confirmó el viaje, que sería el primero del excanciller uruguayo a Cuba desde que asumió al frente del organismo a inicios de 2015.

La entrega del galardón, el 22 de febrero, está a cargo de la organización Red Latinoamericana de Jóvenes por la Democracia, presidida por Rosa María Payá, hija del disidente fallecido en un accidente de tráfico en 2012.

La visita de Almagro implicaría una rara presencia oficial de la OEA en Cuba, que fue suspendida del organismo regional en 1962, en el apogeo de la Guerra Fría y de su enfrentamiento ideológico con Estados Unidos. La isla se niega a regresar al ente a pesar de que fue readmitida en 2009.

Su antecesor, el chileno José Miguel Insulza, estuvo presente en La Habana en 2014, participando de la cumbre de América Latina y el Caribe (Celac), en lo que fue la primera visita de un jefe de la OEA desde 1959.

Pero el cariz distinto de la visita de Almagro -aceptando un premio en honor a un crítico del gobierno cubano- puede levantar viejas rencillas entre la OEA y La Habana.

Cuba ha denunciado las iniciativas de Almagro para mediar en la crisis política de Venezuela, aliado de La Habana, criticando un intento "histérico, torpe y nada ético" de intervenir en los asuntos internos de Caracas cuando el jefe de la OEA convocó una reunión de urgencia en junio de 2016 para discutir el tema. (I)