¿Qué le pasó a James, el gato de Assange?
No está claro dónde o con quién vive el gato de Julian Assange ahora. Pero el felino no se encontraba en la embajada de Ecuador en Londres cuando su dueño fue arrestado por la Policía británica una vez que se le levantó el asilo.
Pero los reportes de medios europeos señalan que James salió de la legación diplomática hace unos meses. La embajada ecuatoriana había impuesto reglas al australiano en 2018, en las que se especificaba que debía encargarse del bienestar, alimentación, aseo y cuidado de su mascota.
For the record: Julian Assange’s cat was reportedly given to a shelter by the Ecuadorian embassy ages ago, so don’t expect a feline extradition in the next few hours.
— James Ball (@jamesrbuk) April 11, 2019
(I genuinely offered to adopt it)
Una periodista del diario italiano Repubblica visitó en noviembre a Assange en la embajada. Allí notó que "Embassy Cat" (El gato de la embajada) ya no estaba. Reportó que el australiano prefirió "ahorrarle un aislamiento que se volvió insoportable y permitirle una vida más saludable".
En ese mismo mes, la activista Hanna Jonasson confirmaba que a pedido de Assange a sus abogados, el felino fue entregado a sus familiares.
In the same document in which Ecuador threatened to hand Assange over for arrest, Ecuador also threatened to put Assange's cat in the pound.
— Hanna Jonasson (@AssangeLegal) November 27, 2018
Insensed at the threat, he asked his lawyers to take his cat to safety. The cat is with Assange's family. They will be reunited in freedom. pic.twitter.com/W9FvDbvQgw
En tanto que la agencia rusa de noticias Sputnik señaló este jueves 11 de abril de 2019 que funcionarios de la embajada ecuatoriana confirmaron que el gato fue retirado en septiembre de 2018 y trasladado a un hogar.
"No está aquí desde septiembre, si no me equivoco. Los abogados del señor Assange se lo llevaron hace mucho (...) No somos una tienda de mascotas, por lo que no tenemos animales aquí", dijo el representante de la embajada a Sputnik.
La agencia Reuters reporta hoy que Embassy Cat fue puesto a salvo y retirado de la sede diplomática antes de que el fundador de Wikileaks fuera detenido por la policía británica.
“Por lo menos el gato se salvó. Sí fue entregado, no sé si a un amigo pero salió ya de la embajada, posiblemente semanas antes” de que se terminara el asilo, dijo el abogado del activista australiano, Carlos Poveda.
Assange adoptó al tierno felino en mayo de 2016. El animal se hizo popular en las redes sociales y tiene cuentas propias en Twitter e Instagram. Seguido miraba por la ventana de la legación diplomática, luciendo una corbata de moda.
El australiano con frecuencia posó con su mascota y publicó sus fotos, donde se lo mostraba jugando o siendo mimado por las visitas, entre ellas personalidades como el documentalista estadounidense Michael Moore.
ACTUALIZACIÓN: Finalmente, WikiLeaks confirmó que Assange pidió a sus abogados que rescaten a su mascota a mediados de octubre pasado. "Se reencontrarán en libertad", recalcó. (I)
We can confirm that Assange's cat is safe. Assange asked his lawyers to rescue him from embassy threats in mid-October. They will be reunited in freedom. #FreeAssange #NoExtradition pic.twitter.com/zSo8RfXXc9
— WikiLeaks (@wikileaks) April 13, 2019