Levantar el bloqueo económico impuesto a Cuba hace más de medio siglo por Estados Unidos es un aspecto esencial para normalizar las relaciones bilaterales -retomadas el 17 de diciembre-, consideró una fuente diplomática de la isla.

Al intervenir en el programa radiotelevisado Mesa Redonda, el director de temas bilaterales de la Dirección General de Estados Unidos de la Cancillería cubana, Yuri Gala, destacó que las conversaciones efectuadas el 21 y 22 de este mes en La Habana para normalizar los nexos, transcurrieron en un clima respetuoso y constructivo.

Precisó varias cuestiones necesarias para el restablecimiento de las relaciones diplomáticas -rotas desde 1961-.

Gala manifestó que nadie puede pretender que Cuba renuncie a sus principios para mejorar las relaciones con Washington. “Nadie puede pretender tampoco que Cuba negocie aspectos de una política que el propio Gobierno estadounidense reconoce que es un fracaso, ni tampoco se puede pretender que el levantamiento del bloqueo se negocie con base en cambios internos en Cuba”, puntualizó el funcionario.

La delegación cubana reiteró su disposición de continuar un diálogo respetuoso con el Gobierno de Estados Unidos, basado en la igualdad soberana, los acuerdos de la ONU y la reciprocidad, sin menoscabo a la independencia nacional y la autodeterminación del pueblo cubano.

“Empoderar al pueblo cubano”

Estados Unidos aspira a impulsar una “mayor apertura” política de la isla y “empoderar al pueblo cubano”, señaló la secretaria adjunta para Latinoamérica del Departamento de Estado de EE.UU., Roberta Jacobson, en una rueda de prensa en la capital cubana.

Aunque reconoció que ambos gobiernos mantienen “profundas diferencias” sobre este particular, indicó que esas discrepancias no tienen por qué representar un obstáculo en las conversaciones que iniciaron para restablecer las relaciones diplomáticas y reabrir en el futuro sus respectivas embajadas, citó el portal alemán dw.de.

Jacobson, quien cerró el viernes el primer encuentro de alto nivel con Cuba en 35 años, confía en poder mantener en “un par de semanas (15 días)” una nueva ronda de conversaciones. Invitó de manera informal a la delegación cubana, encabezada por Josefina Vidal, a la próxima cita en Washington.