Miles de israelíes han vuelto a salir a la calle un sábado más para protestar contra el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y exigir su dimisión por su implicación en casos de corrupción.

La manifestación ha terminado una semana más ante la residencia oficial del primer ministro en un recorrido autorizado por la Policía "aunque no tenía la coordinación necesaria", según fuentes policiales citadas por el diario 'Times of Israel'.

"Conforme a la evaluación del jueves, la Policía preparó vallas por la ruta de la manifestación para mantener a salvo a los asistentes", ha explicado la Policía.

Las movilizaciones han estado centradas en torno a las acusaciones por corrupción contra Netanyahu, si bien a las mismas se han sumado otras protestas contra el Gobierno por la gestión de la pandemia y por la grave crisis económica en la que se encuentra sumido el país.

Netanyahu se convirtió a finales de mayo en el primer jefe del Ejecutivo en ser sometido a un juicio por corrupción mientras ocupa el cargo, tras ser imputado en noviembre de 2019 por el fiscal general del país, Avichai Mandelblit, tras varios meses de investigaciones.

Israel ha sufrido además un drástico repunte de los casos de coronavirus en las últimas semanas que ha provocado que se sobrepasen las cifras registradas durante la primera oleada, lo que ha supuesto un duro golpe para el turismo y la economía del país. (I)