Investigación de la ONU sobre ataques químicos en Siria incluye siete zonas
Los inspectores de las Naciones Unidas continuaron este viernes con su investigación en Siria sobre el supuesto uso de armas químicas, que incluirá siete lugares y de la que esperan elaborar un informe antes de finales de octubre.
En un comunicado de la ONU publicado en Damasco, el grupo de expertos señaló que ha hecho numerosas entrevistas y ha recibido pruebas y documentos.
Esta nueva inspección sobre el terreno, la segunda tras la efectuada el pasado agosto, está previsto que concluya el próximo lunes.
El director del equipo, el científico sueco Ake Sellström, afirmó que están aplicando los mismos "métodos y técnicas de determinación de los hechos imparciales" que en su primera visita.
Sellström citó "métodos ambientales y epidemiológicos" como el muestreo y análisis de laboratorio, así como entrevistas con los médicos, las víctimas y las partes implicadas en los supuestos ataques químicos.
Entre los siete lugares en los que la ONU ha visto justificada una inspección figura Jan al Asal, en la provincia septentrional de Alepo, que fue blanco de un ataque el pasado 19 de marzo.
También está la zona de Guta, en la periferia de Damasco, donde la oposición siria acusó al régimen de haber matado a más de mil personas en un ataque químico el pasado 21 de agosto.
Los expertos, que llegaron hace dos días a Damasco, pertenecen a la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización para la Prohibición de Armas Químicas (OPAQ).
Esta inspección coincide con un atentado en las afueras de Damasco con coche bomba que hoy causó decenas de muertos.
Consejo de DDHH denuncia uso de armas químicas
En una resolución propuesta por once países (incluyendo a Estados Unidos, Turquía y Arabia Saudita), el Consejo "condena enérgicamente el uso de armas químicas, prohibido por la legislación internacional", que "constituye un crimen grave y de efectos devastadores sobre la población civil". El Consejo no da ninguna indicación en cuanto a los autores de esos ataques.
La resolución fue adoptada por 40 votos a favor, uno en contra (Venezuela) y seis abstenciones (Ecuador, Etiopía, India, Kazajistán, Kenia y Filipinas. Actualmente, Rusia y China no son miembros del Consejo).
Esta resolución fue aprobada después de semanas de intensas negociaciones entre Rusia y Estados Unidos, que el jueves en la ONU de Nueva York lograron ponerse de acuerdo respecto a un texto sobre la destrucción del arsenal químico del régimen de Bashar al Asad.
Dicha resolución, que podría ser adoptada a partir del viernes al anochecer, constituye un importante progreso diplomático. Desde que comenzó el conflicto en Siria, en marzo de 2011, el Consejo de Seguridad jamás había logrado ponerse de acuerdo sobre un texto, pues Rusia y China vetaron tres iniciativas.