La infanta Cristina, hija menor del rey Juan Carlos de España, se presentará a declarar en un caso de presunta violación fiscal y lavado de dinero, tras rechazar ayer la imputación.

Los representantes legales de la infanta Cristina presentaron ante el juzgado de Palma de Mallorca la confirmación de que no presentarán recurso contra la imputación, aunque la rechazan.

Los abogados argumentan que la decisión fue tomada en aras de la transparencia y para evitar más consecuencias colaterales, en alusión a la demanda de gran parte de la sociedad española de dar a la familia real un trato ante la justicia igual que cualquier ciudadano. La casa real española valoró de positiva la decisión de la infanta Cristina,

Asimismo, expresaron la disposición de adelantar la declaración antes del 8 de marzo, fecha prevista por el juez José Castro, instructor del llamado caso Nóos que involucra al esposo de la infanta, Iñaki Urdangarin, y un asociado.

La causa provocó daños considerables a la institución monárquica la cual por primera vez en la historia tiene el apoyo de menos de la mitad de la población, según una encuesta este mes del Centro de Investigaciones Sociales, que fija el respaldo en 49,9 por ciento.

La justicia española investiga presuntas maniobras ilegales de Urdangarin mediante el Instituto Nóos, supuestamente sin ánimo de lucro, utilizado para apropiarse de fondos públicos de dos gobiernos autónomos controlados por el Partido Popular.

El esquema consistía en desviar el dinero de Nóos a empresas privadas de Urdangarin, entre estas Aizoon, de la cual son dueños por partes iguales la infanta y su esposo.

Según el auto de imputación de 227 páginas, Aizoon destinó parte del dinero a los gastos personales del matrimonio, viajes, cenas, pagar al personal de servicio de una de sus mansiones, entre otros.