Indignados exigen democracia, Dilma otro modelo de desarrollo
Los movimientos de los indignados de España, Ocupa Wall Street, la Primavera Árabe, los estudiantes de Chile y otras organizaciones reunidas en el Foro Social exigieron una “¡Democracia real YA!, mientras que la presidente de Brasil, Dilma Rousseff, defendió otro modelo de desarrollo sustentable.
“La tarea que nos impone este Foro, como la Río+20, es desencadenar un movimiento de renovación de ideas y nuevos procesos, absolutamente necesarios para enfrentar los días difíciles que hoy vive una amplia parte de la humanidad”, expresó en un evento ante unos 4.000 activistas en Porto Alegre (sur de Brasil), donde se celebra el encuentro que concluirá mañana.
La mandataria manifestó el jueves que lo que estará en debate en la Río+20 es un modelo de desarrollo que articule crecimiento y genere empleo, combata a la pobreza, reduzca las desigualdades y preserve los recursos naturales.
Rousseff presidirá en junio la cumbre de Desarrollo Sustentable de las Naciones Unidas que impulsará una economía verde y social.
La Presidenta destacó los efectos negativos de la crisis que afecta a los países desarrollados: concentración de renta, aumento de la desigualdad, explosión del desempleo y expansión de la pobreza y criticó además las “nefastas” consecuencias sociales de las medidas fiscales aplicadas en algunos países desarrollados.
“La disonancia entre la voz de los mercados y la voz de las calles parece aumentar cada vez más en los países desarrollados, poniendo en riesgo no solo conquistas sociales, sino la propia democracia, el mayor evento de los movimientos sociales del planeta” sentenció, al tiempo que llamó a estas agrupaciones a tener una amplia participación en esa cumbre.
Y fueron los movimientos sociales los que se hicieron sentir ayer en este foro. Ellos centraron uno de los principales debates con una sala repleta de caras nuevas que participaron en las protestas que inundaron las plazas públicas en el mundo el último año y que criticaban en sus eslóganes repetidos el funcionamiento de la actual democracia.
“Hemos visto una ola de indignación en Europa que llegó al corazón de la bestia en Wall Street”, explicó Ester Vivas, una de las “indignadas” tras cuestionar al actual modelo de democracia, que no tiene en cuenta las necesidades colectivas de la mayor parte de la población.
Crisis, planes de austeridad, recortes, la explosión del desempleo y las subvenciones a los bancos que quebraron levantaron las iras de muchos. “El sistema político se volvió incapaz de responder a las demandas sociales y nosotros nos cansamos de estar desilusionados”, resumió Francisco Figueroa, del movimiento de estudiantes de Chile.
Democracia, libertad, justicia son ejes de las protestas árabes. “Esa movilización social y política en el mundo árabe debe ser traducida de manera que la sociedad civil se apropie de ella”, expuso Ahmed Aljardat, del Foro Social de Palestina.
“Los que ocuparon Wall Street sintieron por primera vez que tenían una voz”, expresó Nelini Stamp, una joven activista que participó de la ocupación de la plaza en el corazón del mundo financiero y cuyo lema fue: “somos el 99%, ustedes -los que gobiernan la política y la economía- son el 1%”.