Bogotá.- La guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) anunció que se levanta temporalmente de la mesa de negociaciones de paz de La Habana, Cuba, mientras analiza la propuesta del Gobierno de llevar a un referendo los acuerdos que se alcancen en los diálogos.

En respuesta, el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, consideró “legítima y válida” la pausa anunciada por la guerrilla, pero advirtió que eso debe tener celeridad para que las conversaciones sigan avanzando. “Legítimo que lo estudien, pero el tiempo pasa y la paciencia del pueblo colombiano tiene su límite y tenemos que seguir avanzando en las conversaciones”, precisó Santos.

Por su parte, el  jefe de la delegación del Gobierno, Humberto de la Calle, quien viajó a Colombia el jueves en la noche para atender un asunto personal, declaró que “el diálogo no se ha roto”.

Miembros de las
FARC confirmaron
que los diálogos
se reanudarán el próximo lunesEn una declaración leída ayer ante la prensa, en La Habana, por el guerrillero Pablo Catatumbo, alias de Jorge Torres Victoria, la organización comunista dijo que “ha decidido hacer una pausa en la discusión de la agenda para centrarse exclusivamente en los análisis de los alcances de la propuesta gubernamental, independiente de la consulta interna que debe hacerse como organización”.

Las FARC recordaron que desde el inicio de los diálogos propusieron convocar una asamblea nacional constituyente para que sea el pueblo el que decida sobre los temas cruciales de la realidad política, económica y social de todos los colombianos.

En contraste, dijo Catatumbo, “ayer el Gobierno comunicó al país su decisión de apelar al referendo como mecanismo de refrendación, sin para nada mencionar los procedimientos de construcción democrática de lo que sería refrendado”.

La agrupación no mencionó cuánto durará la pausa que harán en las negociaciones, pero se conoció que tanto la delegación del grupo guerrillero como la del Gobierno sostendrán hoy una reunión que ya estaba programada con una comisión de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), indicó el diario colombiano El País. La agencia cubana Prensa Latina informó que miembros de la agrupación confirmaron que los diálogos se reanudarán el lunes próximo.

El gobierno de Santos y los presidentes de los partidos que lo apoyan (Partido de la U, Conservador, Liberal, Cambio Radical y Partido Verde) presentaron el jueves ante la Secretaría del Senado, un proyecto de ley para que el referendo sobre un eventual acuerdo de paz coincida con las elecciones que el país celebrará en marzo y mayo de 2014.

El presidente Santos promovió este proyecto con el objetivo de consultar a los colombianos sobre la paz el próximo 9 de marzo, cuando están previstas las elecciones legislativas, o el 25 de mayo, fecha de los comicios presidenciales.

Refrendar los acuerdos

El Jefe de Estado aseguró que lo que han propuesto en relación al proceso de Cuba ha sido analizado previamente y consultado, ya que la intención, según reiteró, es lograr prontamente un acuerdo definitivo para terminar el conflicto armado.

“Lo hemos hecho a conciencia, planeando y estudiando las alternativas”, precisó Santos, quien agregó: “El referendo es un acto de responsabilidad con el país y con las futuras generaciones, porque qué tal que si llegamos a unos acuerdos no tengamos los instrumentos y no hayamos previsto la forma de refrendar esos acuerdos”.

Santos indicó que se escogió el mecanismo del referendo porque es el mejor camino, a juicio del Gobierno, para refrendar los acuerdos que se logren en Cuba.

El gobierno de Santos y las FARC comenzaron el diálogo de paz en noviembre de 2012 y esta semana  entraron en su decimotercera ronda de diálogo.

Hasta ahora, las delegaciones han discutido dos puntos de una agenda de cinco: el desarrollo rural -ya consensuado- y la participación política de la guerrilla.

Quedan todavía por abordar los puntos sobre drogas ilícitas, abandono de las armas y reparación a las víctimas.

El mecanismo de diálogo prevé ciclos y pausas en las conversaciones, aunque esta es la primera vez  que solo una de las partes anuncia públicamente un alto.

El proceso de paz cuenta con el respaldo de Noruega y Cuba, como países garantes, y de Venezuela y Chile como acompañantes.

DOS MUERTOS EN BOYACÁ POR PARO AGRARIO

Un motociclista, identificado como Mauricio Florián, y otra persona aún sin identificar, murieron  a raíz del bloqueo en las vías en el departamento de Boyacá, en el centro de Colombia, en medio de las protestas campesinas que ayer cumplieron su quinto día y han dejado 175 detenidos.

A pesar del llamado que a primera hora de ayer realizó el general de la Policía, Rodolfo Palomino, para que los manifestantes de Boyacá no siguieran atravesando alambres en la vía, lo que puede generar un accidente, eso no pasó y una persona murió por esta causa.

De acuerdo con la información entregada por las autoridades, Mauricio Florián, quien se desplazaba en una motocicleta, no vio el alambre que atravesaba la vía, cayó de la moto y tras el impacto falleció.

El segundo incidente se dio ayer cuando un paciente murió al no poder ser trasladado a un centro asistencial en la ambulancia en la que era conducido.  

Este hecho fue reprochado por el ministro de Salud, Alejandro Gaviria, quien confirmó el suceso a través de su cuenta de Twitter. “Inaceptable. Murió un paciente de enfermedad renal crónica. Iba de  Miraflores a Tunja. La ambulancia fue bloqueada en Ramiriquí”, escribió Gaviria.

El paciente que perdió la vida tenía 72 años y venía procedente del municipio de Rondón (Boyacá), ya que fue remitido este jueves desde Miraflores a la capital boyacense. Aunque la Policía  reportó que ha desbloqueado 21 puntos para permitir la movilidad en las carreteras, la Policía de Carreteras registró en la madrugada de ayer 20 vías cerradas por las protestas en 8 de los 32 departamentos.

Desde el inicio de las protestas, 15.000 agentes policiales han sido desplegados en el país para controlar las manifestaciones protagonizadas por aproximadamente 200.000 campesinos, según estiman los líderes de las movilizaciones.

Los campesinos exigen al Gobierno instalar una mesa de diálogo para establecer precios mínimos de sustentación a sus productos y una rebaja para los precios de los fertilizantes y las semillas. También piden derogar los acuerdos de libre comercio firmados por el Gobierno colombiano con Estados Unidos y la Unión Europea, a través de los cuales se importan diversos productos lo que -según los agricultores- les perjudica porque genera una “competencia desleal” con la producción colombiana. (EFE/AFP).