Hong Kong rechaza plan de extradición a China
La policía de Hong Kong empleó gases lacrimógenos, gas pimienta y mangueras de agua contra los manifestantes que rodearon el edificio del gobierno para oponerse a un proyecto de ley de extradición a China.
La multitud, con una gran mayoría de jóvenes, llenó las calles cercanas, derribó barreras y tuvo escaramuzas con la policía ante la sede del Gobierno y las oficinas del Consejo Legislativo.
Al mediodía, con la turba en aumento y las carreteras principales bloqueadas por los protestantes, los miembros del Consejo Legislativo (LegCo) anunciaron que retrasaban la segunda lectura del proyecto de ley “a una fecha posterior”.
“Llamo a los ciudadanos que se concentraron a la moderación, a dispersarse pacíficamente y a no desafiar la ley”, pidió en vano Matthew Cheung, secretario en jefe del gobierno, en un video difundido en las redes sociales.
Marco, un manifestante, dijo que confiaba en que la protesta persuadiera al Gobierno de retirar las enmiendas propuestas.
“Queremos que el gobierno deje la legislación y no vuelva a tratarla”, dijo.
La iniciativa
Las autoridades de Hong Kong promueven un proyecto de ley que autorizaría las solicitudes de extradición a China, Taiwán y Macao de criminales sospechosos de delitos como homicidio y violación.
La jefa del gobierno, Carrie Lam, afirma que el texto responde a normas internacionales en materia de derechos humanos y que solo afectará a los autores de crímenes graves, susceptibles de recibir condenas de más de siete años de prisión.
Los promotores de la ley afirman que los tribunales en Hong Kong tendrán la decisión final sobre las extradiciones y que cada caso se abordará individualmente.
También que los que sean acusados de crímenes políticos y religiosos no serán extraditados.
Los opositores temen al proyecto, sin embargo, que la población de Hong Kong (7,3 millones de personas) así como la gente que transita por el aeropuerto queden a merced de la justicia china.
El rechazo del proyecto, que será votado el 20 de junio, reúne a sectores distintos de la población, incluyendo abogados, influyentes organizaciones jurídicas, directivos empresariales, cámaras de comercio, periodistas, activistas y diplomáticos occidentales.
China recuperó el control de Hong Kong en 1997, hasta entonces una colonia británica, tras un acuerdo con Londres. Pero tiene cierta autonomía y goza de libertades que no existen en China continental.
Los medios y organizadores afirman que las protestas son las más grandes desde los mítines en favor del Movimiento de los Paraguas que propendía por la democracia en 2014, cuando los manifestantes usaron paraguas para protegerse contra el spray de pimienta de la Policía. (I)