Hombre que quiso atentar contra Washington quería matar a unas 30 personas
El marroquí detenido por intentar atentar contra el edificio del Capitolio en Washington planeaba matar unas 30 personas en un ataque suicida, dijeron este sábado fuentes cercanas a la investigación consultadas por una radio local.
Según la emisora de la ciudad de Washington WTOP, Amine Khalifi quería disparar contra viandantes y barajó ataques contra una sinagoga y un restaurante de la capital estadounidense frecuentado por personal militar.
De acuerdo con la versión de agentes de lucha antiterrorista, el marroquí llegó a visitar el restaurante y hasta interrogó a empleados para saber las horas de mayor ocupación.
Finalmente, Khalifi se centró en planear un atentado suicida en el Capitolio, sede del Congreso de EE.UU., donde preveía acabar con la vida de una treintena de personas tras disparar contra los miembros de seguridad de la entrada e infiltrarse en el interior para detonar un chaleco bomba.
El joven de 29 años y origen marroquí fue detenido ayer por agentes de la Oficina Federal de Investigación (FBI) en Washington cuando supuestamente se dirigía a cometer el atentado suicida, según informaron fuentes gubernamentales y policiales.
No obstante, Khalifi, que residía en el estado de Virginia y estaba desempleado, estuvo controlado durante un año por agentes de seguridad del Estado, que revelaron que el detenido intentó también fabricar explosivos caseros detonados a distancia con un teléfono móvil.
El marroquí creyó que había adquirido un arma y explosivos a una célula de Al Qaeda, pero el material era inservible y había sido provisto por agentes encubiertos.
Cuando fue arrestado en las cercanías del Capitolio, Khalifi llevaba el chaleco con explosivos y el arma, según los documentos sobre su investigación.
Khalifi fue trasladado ayer mismo a un tribunal de Virginia para prestar declaración y las autoridades iniciaron una inspección de su domicilio en Arlington.
De acuerdo con el Departamento de Justicia, Khalifi actuó solo y no está conectado con ninguna organización terrorista, aunque las autoridades llevaban tiempo investigándolo por sus puntos de vista "extremistas".
En septiembre pasado las autoridades arrestaron a un ciudadano estadounidense cerca de Boston acusado de conspirar para atentar contra el Pentágono y el Capitolio con un avión a control remoto cargado de explosivos C-4.
Rezwan Ferdaus, de 26 años, también fue acusado de intentar proveer apoyo material y recursos a Al Qaeda para perpetrar ataques contra soldados estadounidenses en el extranjero.
En el último año, al menos 20 personas han sido detenidas en EE.UU. por cargos relacionados con terrorismo, según el Comité de Inteligencia del Senado.
La mayoría de las detenciones ha involucrado a "lobos solitarios" capaces de utilizar internet para fabricar bombas, explicó recientemente el director de FBI, Robert Mueller.