Las autoridades de Durango, en el norte de México, encontraron 17 cadáveres en fosas comunes, con lo que suman 218 los cuerpos hallados en ese estado mexicano desde principios de abril, informaron hoy fuentes oficiales.

De acuerdo con un comunicado de la Secretaría de Seguridad estatal, citado por medios locales, agentes federales y militares encontraron una nueva fosa en un terreno baldío en Durango, a una calle de donde se había encontrado otra tumba clandestina recientemente.

El pasado viernes las autoridades habían declarado que la búsqueda de restos humanos había concluido, no obstante, el nuevo hallazgo, mantiene abiertas las investigaciones y sube a seis el número de fosas clandestinas encontradas.

El 11 de abril pasado se localizó la primera de estas fosas en un zona residencial, donde fueron exhumados 89 cadáveres, cifra que creció hasta los 218 cuerpos.

Según diversos medios, las pesquisas apuntan a que el cartel de Sinaloa, Los Zetas y la organización criminal de los hermanos Beltrán Leyva pueden ser los autores de las muertes.

La cifra de personas encontradas en fosas en Durango supera los 183 cadáveres hallados en otras localizadas en San Fernando, en el nororiental estado de Tamaulipas.

Estos últimos correspondieron a víctimas de secuestro o de homicidios arbitrarios, la mayoría de ellos pasajeros de autobuses interurbanos interceptados por la organización criminal de Los Zetas.

Durango, que junto con los estados de Chihuahua y Sinaloa conforma el llamado triángulo dorado de las drogas en México, es considerado uno de los refugios del capo Joaquín "El Chapo" Guzmán, líder del cartel de Sinaloa.