Publicidad

Ecuador, 23 de Noviembre de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
Comparte

En 2009 el presidente barack obama prometió cerrar la base militar

Guantánamo aún mantiene a 61 reos

La cárcel en Guantánamo fue abierta en 2002 por el Gobierno del republicano George W. Bush para albergar a sospechosos de terrorismo.
La cárcel en Guantánamo fue abierta en 2002 por el Gobierno del republicano George W. Bush para albergar a sospechosos de terrorismo.
Foto: Internet
17 de agosto de 2016 - 00:00 - Redacción y Agencia AFP

El gobierno estadounidense trasladó a Emiratos Árabes Unidos a 15 detenidos de la cárcel militar de Guantánamo, Cuba, lo que constituye el mayor traspaso aprobado por el presidente Barack Obama, quien prometió cerrar este penal en el 2009 durante su primer mandato.

El envío de 12 yemeníes y 3 afganos reduce a 61 el número de reclusos en la prisión, abierta en 2002 por el gobierno del republicano George W. Bush quien tras los atentados del 11 de septiembre apresó, sorteando las salvaguardas internacionales de derechos humanos, a todo sospechoso de terrorismo.

La mayoría de estos reos fueron detenidos sin haber cometido ningún delito por lo que su detención quedó en el limbo. Sin tener ningún derecho se justificó su  arresto bajo la figura de la ley militar contra los llamados “combatientes enemigos”.

La guerra civil que se desarrolla desde 2015 en Yemen complicó a Washington la forma de encontrar a quién pueda aceptar a sus 12 refugiados. EE.UU. mediante un comunicado agradeció al gobierno de Emiratos Árabes Unidos por su gesto humanitario y su apego a los esfuerzos para cerrar este controvertido centro de detención.

Naureen Shah, director del programa de seguridad y derechos humanos de Amnistía Internacional en Estados Unidos explicó que “esto supone un importante rechazo a la idea de que Guantánamo va a permanecer abierta por tiempo indefinido”.

Luego del traslado los exreclusos son liberados bajo condiciones, dispositivos de seguridad y programas de reinserción, que varían según los países que los reciben. La medida es para evitar cualquier tipo de incidentes como el que surgió en Uruguay con el refugiado sirio Jihad Ahmad Deyab quien mantuvo en alerta a las autoridades  estadounidenses al desconocerse su paradero.

El estatus de refugiado de Ahmad Deyab no le prohíbe dejar el país. Sin embargo, tras localizarlo en Venezuela será deportado a Uruguay.

La gestión de Obama se acelera

Las liberaciones se apresuran en los últimos años en cuanto a la aspiración del presidente Obama de cumplir su promesa de campaña de cerrar la base prisión, a la que calificó de “vergonzosa”.

Alfredo Vera, miembro del consejo ejecutivo de la Fundación Guayasamín, destacó que lo difícil fue comenzar. “Cuando algo no se ha movido durante años, el inicio ya da la esperanza de que los procesos vayan a continuar”. Por su parte, Lee Wolosky, enviado especial del departamento de Estado para el cierre de Guantánamo enfatizó que “el mantenimiento de este centro de detención debilita la seguridad nacional porque agota nuestros recursos, afecta las relaciones con nuestros socios y aliados claves y lo único que hace es reforzar la conciencia y la voluntad de los extremistas violentos”.

Al respecto, Vera acotó que esto demuestra que Obama “está sintiendo la presencia continental a favor de Cuba. Ellos tienen interés de restablecer relaciones con América Latina, de modo, que el hecho que se vive actualmente va a impulsar mucho este proyecto ya que es un interés de ambas naciones (Cuba  y Estados Unidos)”.

Sin embargo, la clausura del centro de detención, antes de que Obama termine su segundo mandato, en enero de 2017, parece improbable ante el rechazo del Congreso - dominado por republicanos- por recibir en territorio estadounidense a los reos catalogados como peligrosos. De hecho, su candidato, Donald Trump, ya se comprometió  a llenar la base naval con los “tipos indeseables” y a restablecer torturas “bastante peores que la simulación de ahogamiento”, conocida como “submarino”.

Hasta la fecha existe una veintena de presos autorizados a salir pero están a la espera de que un tercer país los acoja bajo un régimen inicial de libertad vigilada. Los traspasos se aprueban tras un intenso proceso de análisis del gobierno estadounidense en que el secretario de Defensa avisa al Congreso un mes antes de que la salida no suponga una amenaza de seguridad.

Los últimos traspasos significativos de Guantánamo fueron en abril cuando 9 presos fueron a Arabia Saudí y en enero llegaron otros 10 a Yemen. (I)

Contenido externo patrocinado

Ecuador TV

En vivo

El Telégrafo

Pública FM

Noticias relacionadas

Social media