Fósil hallado en Florida tiene 13.000 años de antigüedad
El hueso fósil con un tosco dibujo de un mastodonte o mamut en su superficie hallado en Vero Beach (Florida) es auténtico, lo que convierte la pieza en la más antigua de las Américas, con al menos unos 13.000 años de antigüedad.
Según la investigación publicada en el Journal of Archaeological Science, las pruebas realizadas por expertos de la Universidad de Florida (UF) y del Museo de Historia Natural del Museo Smithsonian han demostrado que el fragmento de fósil y el grabado son auténticos.
La autenticidad del fósil y el grabado fue determinada tras llevar a cabo cuidadosos y numerosos exámenes, "ninguno de los cuales fue capaz de demostrar que el fósil y la talla son falsos", dijo a Efe Bárbara Purdy, exprofesora de Antropología de la UF, que dirigió la investigación.
Los científicos de la UF estiman que el grabado podría remontarse a la última edad de hielo, miles de años antes de la construcción de Stonehenge, el círculo de grandes bloques de piedra del famoso Neolítico, en Inglaterra.
El grabado tallado en el hueso muestra a un mamut caminando y "es el más antiguo y el único ejemplo conocido del arte en la era glacial que dibuja a un proboscídeo (animales con trompa) en las Américas", señaló en un comunicado el Smithsonian.
La pieza fue descubierta en 2006 por James Kennedy, de 39 años, un coleccionista de fósiles aficionado que encontró este fragmento de hueso de mamífero en un terreno cercano al yacimiento arqueológico denominado "Old Vero Site", donde se hallaron huesos humanos en excavaciones realizadas entre 1913 y 1916.
La autenticidad de la pieza es una prueba irrefutable de que Florida estuvo habitado por seres humanos en esa era glacial y que éstos coexistieron con mamíferos como el mastodonte y el mamut.
Eso es lo que resulta "único", porque significaría que el grabado en el hueso fue realizado poco después de la muerte del animal, "hace unos 13.000 años, que es cuando estos mamíferos se extinguieron", puso de relieve Purdy, profesora emérita de la UF, quien comenzó la investigación en 2009.
Para Dennis Stanford, antropólogo del Museo de Historia Natural del Smithsonian, miembro del equipo de investigación, se trata de un "descubrimiento increíble", ya que "hay cientos de grabados de proboscídeos en paredes de cavernas o en huesos en Europa, pero ninguno en América hasta ahora".
El fósil, de 38 centímetros de largo, corresponde a un fragmento de hueso de un animal mamífero, probablemente un mastodonte, un mamut o un perezoso gigante, aunque no fue posible precisar más el diagnóstico debido a las condiciones en que se encuentra la pieza.
Purdy apuntó que los resultados de la investigación son un ejemplo excelente del "valor de la investigación interdisciplinar y la cooperación entre los científicos".
En ese contexto, explicó que la autenticidad de los grabados en el hueso había despertado "considerable escepticismo" hasta que fue "examinado exhaustivamente" por arqueólogos, paleontólogos, antropólogos forenses e ingenieros científicos.
Al parecer, no fue hasta 2009 que el descubridor y propietario del fósil, Kennedy, descubrió la imagen tallada tras limpiar a fondo de polvo la pieza.
A raíz de los descubrimientos en "Old Vero Site", la ciudad de Vero Beach, en la costa este de Florida, y el condado de Indian River aprobaron una serie de resoluciones para proteger el yacimiento arqueológico