Fiscalía investiga nexos con narcos de los Hernández
La Fiscalía de Nueva York notificó que llamará como testigos a cinco narcos presos en Estados Unidos para que aporten en la indagación que determinará si el presidente hondureño, Juan Orlando Hernández, recibió un millón de dólares de parte de Joaquín “El Chapo” Guzmán.
Aún no se han presentado cargos contra el presidente Juan Orlando Hernández, quien tuiteó que “la alegación en sí es 100% falsa, absurda y ridícula”.
Las declaraciones de la Fiscalía son parte de la apertura del juicio al hermano del presidente, el exdiputado hondureño Juan Antonio “Tony” Hernández Alvarado, de 41 años, acusado de negociar con narcos de siete países para traficar toneladas de cocaína a EE.UU. más de una década.
Durante la audiencia, un agente hondureño de la Dirección de Lucha Contra el Narcotráfico testificó con una libreta como prueba de los supuestos nexos del mandatario y de su hermano con el narcotráfico.
El detective viajó desde Honduras para su comparecencia en la corte. Univision Noticias obtuvo una copia completa de la “narcolibreta” que consistía en 11 cuadernos: nueve de ellos del tamaño de un diario y dos cuadernos de bolsillo. En total, son 350 páginas.
Las libretas contienen detalles de numerosos envíos de cocaína de cientos de kilos que, supuestamente, fueron recibidos por “Tony” Hernández y luego distribuidos a sus conspiradores, incluido Nery Orlando López Sanabria, uno de los presuntos traficantes más notorios que operan en Honduras.
El fiscal Jason Richman aseguró que entre los cómplices del acusado que testificarán en contra de los hermanos Hernández constan Alexander Ardón, exalcalde de El Paraíso que se entregó a la Administración para el Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) en febrero; y Devis Leonel Rivera Maradiaga, cabecilla del cartel Los Cachiros.
Con la testificación de los narcos, la Fiscalía procura demostrar que las campañas electorales de Juan Orlando Hernández y su antecesor Porfirio Lobo (2010-2014) fueron financiadas al menos parcialmente con recursos del narcotráfico.
Hasta ahora, Lobo tampoco enfrenta cargos en EE.UU. y rechazó rotundamente que el narcotráfico financiara la campaña de 2013.
La implicación del mandatario
Juan Orlando Hernández llegó al poder con el compromiso de luchar contra el narcotráfico y la criminalidad. Sin embargo, ha enfrentado intermitentes olas de protesta desde que asumió su primer período de gobierno (2014-2018) y después de la cuestionada reelección para 2018-2022, por supuestos vínculos con la corrupción y el narcotráfico.
Su hermano fue detenido en Miami el año pasado y su juicio en una corte federal de Manhattan comenzó el miércoles con la selección del jurado y los primeros alegatos.
“Tony” es acusado de conspirar con narcos desde 2004, por lo que podría recibir una sentencia mínima de cinco años de prisión y un máximo de cadena perpetua.
El exdiputado siguió los alegatos en la corte con una calma que contrasta con la violencia que le atribuye la Fiscalía, que lo vincula con dos asesinatos de narcos entre 2011 y 2013, antes de llegar al Congreso.
El fiscal Richman sostuvo que “Tony” era parte de una estructura de narcotráfico “auspiciada por el Estado” hondureño y protegida por alcaldes, congresistas, generales de las Fuerzas Armadas y jefes policiales.
Pese a la controversia que gira en torno al mandatario de Honduras, se reunió la semana pasada en Washington con el presidente estadounidense, Donald Trump, de quien recibió elogios, tras la firma de un acuerdo de cooperación entre ambos países para frenar las corrientes migratorias. (I)