La Fiscalía de Colombia capturó a dos policías, una funcionaria pública y un civil por permitir el transporte de productos químicos usados aparentemente por disidencias de las FARC para elaborar cocaína en el departamento de Nariño, fronterizo con Ecuador, informó la entidad.

Tras las investigaciones, se constató que los policías, comandantes de dos estaciones, habrían cobrado entre 700.000 y un millón de pesos (entre $ 223 y $ 319) para permitir el paso de insumos químicos y de la droga una vez producida, detalló la Fiscalía en un comunicado.

Los uniformados fueron identificados como el intendente Pablo Emigdio Ruano Mora, comandante de la estación en el corregimiento (pueblo) de Pisanda, y el intendente Wilmer Arbey Muñoz Prado, comandante de la estación del municipio La Cruz, en Nariño.

Asimismo, Yeimi Adriana Bolaños Molina, funcionaria de la Alcaldía de La Cruz, y su pareja, Oduber Arleyo Realpe Alvear, fueron capturados por coordinar y transportar la droga desde Nariño hasta Cali, capital departamental del Valle del Cauca.

Según la Fiscalía, los capturados colaboraban con una disidencia de las FARC y con la banda criminal Héroes de la Cordillera, que se dedican al narcotráfico en esa zona del país.

El Gobierno colombiano y las FARC, ahora convertida en partido político, firmaron un acuerdo de paz en noviembre de 2016, aunque algunos de sus integrantes no se acogieron a los acuerdos y conformaron grupos disidentes que en muchos casos han heredado las actividades ilegales de la antigua guerrilla.

Los detenidos fueron imputados por los delitos de cohecho, concierto para delinquir con fines de narcotráfico, y tráfico, fabricación o porte de estupefacientes. (I)