Fidel Castro recomienda a los gobiernos "preocuparse por el tema de la alimentación"
El líder cubano Fidel Castro sugirió, al cumplir 89 años, que los gobiernos "deben preocuparse por el tema de alimentación", reveló este viernes el presidente boliviano Evo Morales tras retornar de un viaje a La Habana.
Castro, acompañado por el mandatario venezolano Nicolás Maduro, sorprendió el jueves al gobernante boliviano al visitarlo en su hotel habanero y sostener los tres un encuentro de cinco horas, según dijo Morales en una reunión con concejalas en Cochabamba (centro).
Castro "nos recomendó -al compañero Maduro (y a mí)- cómo los gobiernos y presidentes deben preocuparse en el tema de la alimentación", señaló el mandatario boliviano, quien suele llamar de "abuelo sabio" a Fidel.
"Después de estar cinco horas ya no me habló de educación ni de salud (temáticas de anteriores encuentros), sólo me habló de alimentos y alimentación y me decía que la mitad del mundo está mal alimentado", abundó.
La superficie cultivada en Bolivia se incrementó a 4,7 millones de hectáreas en 2014, principalmente por los cultivos de soja y quinua, según un informe del gobernante al Congreso el pasado 6 de agosto.
Respecto a la reapertura este viernes de la embajada de Estados Unidos en La Habana luego de 54 años de ruptura, Morales hizo votos porque "estas relaciones diplomáticas permitan acabar con ese bloqueo económico contra Cuba".
Morales, primer presidente indígena boliviano y de fuerte convicción socialista, exaltó a Fidel y Cuba que aguantaron un férreo bloqueo económico impuesto por Estados Unidos en 1962.
En la línea de apertura, Bolivia manifestó el martes pasado su deseo de recomponer las relaciones diplomáticas con Estados Unidos y volver a nombrar embajadores, tal como hizo Washington con Cuba.
Morales hizo tal declaración tras recibir en el presidencial Palacio Quemado al encargado de Negocios de EE.UU., Peter Brennan, máximo diplomático en ejercicio, tras la expulsión recíproca de embajadores en 2008.
Morales expulsó al embajador de EEUU en 2008, acusándolo de apoyar un supuesto complot de la derecha local. Washington negó la acusación y también echó al embajador boliviano en reciprocidad. Poco después, Morales expulsó también a la agencia norteamericana antidroga DEA y al programa de cooperación USAID. (I)