La presidenta argentina Cristina Fernández instó a los ciudadanos a mantener viva la lucha por los derechos humanos, al inaugurar este martes el Sitio de la Memoria en donde funcionó uno de los mayores centros de detención de la última dictadura (1976-83).

"Los 40 millones de argentinos tenemos la responsabilidad de garantizar el respeto a los derechos humanos, la memoria y la justicia. No pueden quedar solo en manos de un gobierno o de la justicia", dijo Fernández visiblemente emocionada durante el acto en Buenos Aires.

En el estrado, la mandataria estuvo flanqueada por Hebe de Bonafini y Estela de Carlotto, presidentas de las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, dos símbolos de la lucha por los derechos humanos durante el régimen cívico-militar, que dejó un tendal de 30.000 desaparecidos según organismos humanitarios.

"Hoy aquí hay una victoria de la vida sobre la muerte, de la memoria sobre el olvido, de la patria sobre la antipatria", dijo Fernández.

El Sitio de la Memoria propone a los visitantes de lo que era la antigua Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA) un recorrido por lugares tenebrosos del excampo de detención clandestina con salas donde se torturó y atendieron partos.

"¿Cómo era posible que en este lugar nacieran niños?", reza un cartel en el lugar donde las detenidas daban a luz a bebés que luego eran robados para entregarlos a personas cercanas a militares o fuerzas de seguridad.   

Se estima medio millar de niños fueron separados de sus padres y de ellos 116 lograron recobraron su verdadera identidad. Sus historias compilan una de las páginas más dramáticas de los años de plomo en este país.

De este lugar emplazado en medio de un barrio residencial de la zona norte de Buenos Aires, por donde pasaron 5.000 opositores y solo sobrevivió un centenar, salían en camiones los detenidos drogados para embarcarlos en los llamados vuelos de la muerte, desde donde eran arrojados al Río de La Plata.

El lugar tiene 17 hectáreas y fue rescatado por el fallecido expresidente Néstor Kirchner (2004-2007), esposo de la actual mandataria, para que en lugar de muerte y dolor, se "llenara de vida e iniciativas culturales".

En el excentro de detención, funcionan actualmente el Archivo Nacional de la Memoria, el canal cultural Encuentro y el infantil Paka Paka, oficinas de los organismos de derechos humanos y galerías de arte, además de ser espacio para la realización de recitales y conciertos. (I)