El presidente Santos pidió perdón por los excesos de la fuerza pública
Familias colombianas llevan 30 años buscando a sus seres queridos
Luego de 30 años del holocausto del Palacio de Justicia en Colombia, todavía no se sabe la verdad de lo que ocurrió allí, donde murieron 122 personas, entre ellos los máximos jerarcas de la justicia de este país en ese año fatídico, 1985.
Cada año, por esta época, se revive la herida que dejó para miles de colombianos cuando un comando de la guerrilla del M-19 irrumpió a sangre y fuego para tomarse las instalaciones del Palacio de Justicia en la Plaza de Bolívar, en el corazón de Bogotá, y luego se registró la retoma por parte de las fuerzas militares.
Sin embargo, tanto las familias de las víctimas como gran parte del país, reclaman que las autoridades políticas y militares de esos años digan la verdad de lo que sucedió, empezando por el expresidente Belisario Betancur.
El exmagistrado Carlos Julio Betancur, quien se salvó de la acción militar, dijo que “ya es hora de que el expresidente Belisario diga la verdad, y la verdad es que los militares le dieron un golpe de Estado durante dos días, solo así el Gobierno pudo permitir la barbarie que sucedió con el sacrificio de mis colegas al interior del Palacio”.
Santos pide perdón
En un hecho inédito, el presidente Juan Manuel Santos reconoció ayer la responsabilidad que tuvo el Estado colombiano en el holocausto y pidió perdón por los errores cometidos durante ese hecho.
El jefe de Estado, en cumplimiento de una sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), afirmó que pide perdón de corazón para tejer la reconciliación que se requiere para alcanzar la paz y, además, reconoció que hubo fallas de los agentes del Estado en la recuperación del Palacio de Justicia.
El mandatario rechazó la forma en que la guerrilla del M-19 se tomó el Palacio de Justicia, pero también hizo énfasis en la manera en la que la fuerza pública retomó el control de ese lugar, la cual sufrió de procedimientos irregulares.
“Porque ningún colombiano, ninguno, puede verse expuesto a la vulneración de sus derechos por parte de agentes del Estado, que están para protegerlos, ni de cualquier otra persona. Aquí se presentó una acción lamentable, absolutamente condenable, del M-19, pero si hubo fallas en la conducta y procedimientos de los agentes del Estado, así debe reconocerse”, precisó el gobernante Santos.
“Nos duele, nos acongoja saber que tantos compatriotas aún son esperados en sus hogares, sin respuestas todavía para sus familiares. No queremos más desapariciones. Por eso hoy, ante los familiares de las víctimas del Palacio de Justicia, les digo que no vamos a descansar ni vamos a ahorrar ningún esfuerzo para encontrarlos”.
Las víctimas aún esperan
De otra parte, algunos familiares dijeron a EL TELÉGRAFO que todavía no tienen tranquilidad con lo que sucedió. Héctor Jaime Beltrán, padre de Héctor Jaime Beltrán Fuentes, mesero del Palacio cuando se presentó el hecho, recordó que “importantes pruebas fueron destruidas en un pacto de silencio” y dijo que es difícil describir el dolor y la impotencia que los ha agobiado durante estas tres décadas.
“Estamos aquí en nombre de nuestros familiares desaparecidos por los militares. Aceptamos este acto público de perdón ordenado por la CorteIDH, pero consideramos que quienes deberían estar aquí son el expresidente Belisario Betancur, que nunca asumió la grave responsabilidad que le corresponde; sus ministros y la cúpula militar de la época que retuvo, torturó y desapareció a nuestros familiares”.
Por su parte, Francisco Lanao, esposo de Gloria Anzola, otra de las desaparecidas, sostuvo que los oficiales condenados por estos hechos tienen una detención privilegiada, “lo que es una burla para las víctimas”. Afirmó que las condenas del coronel Alfonso Plazas Vega y el general Arias Cabrales “son fundamentales en el camino de la justicia”.
Lanao recordó que hace cinco años el presidente Juan Manuel Santos, durante la conmemoración de los 25 años del holocausto, se comprometió a que la verdad saliera a flote, pero la impunidad continúa campante.
Por su parte, Alejandra Rodríguez recordó a los familiares que murieron esperando la verdad, pese a la lucha que emprendieron desde diciembre de 1985, un mes después de la toma.
“Hoy rendimos un homenaje a su memoria, a su valor y a su lucha. Este acto de hoy solo tendrá valor si hay un verdadero compromiso del Estado por la verdad. No queremos la verdad a cuentagotas”, concluyó Rodríguez, hija de Carlos Rodríguez Vera, administrador de la cafetería. (I)
La Fiscalía tiene 3 líneas de investigación
En los últimos meses, la Fiscalía General abrió tres nuevas líneas de investigación por los hechos. El ente investigador busca establecer, tres décadas después, el presunto conocimiento que se tenía por parte del Gobierno, el abuso de la fuerza y un pacto de silencio que se habría celebrado para que no se conociera la verdad de lo que ocurrió.
El fiscal general, Eduardo Montealegre, confirmó la citación de tres exministros del gobierno de Belisario Betancur Cuartas. Sus declaraciones serán la piedra angular para conocer lo que pasó en el despacho presidencial y el motivo de varias decisiones que desde el primer momento fueron rechazadas por los testigos.
Los exministros Noemí Sanín (Comunicaciones), Enrique Parejo (Justicia) y Jaime Castro (Gobierno) deberán rendir sus declaraciones. (I)