Fallo de la CIJ afecta la pesca en el Caribe
San Andrés.-
La modificación de los límites marítimos entre Nicaragua y Colombia por la Corte Internacional de Justicia (CIJ) no solo ha afectado a estos países, también ha cambiado las reglas del juego a la industria pesquera del Caribe occidental y a las naciones vecinas.
Así lo explicó un experto de las cartas de navegación de esos países, el hondureño Santo Donaldo López, capitán de un pesquero industrial que extrae langosta de los alrededores del archipiélago colombiano de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, epicentro del litigio. “Hay caos por todas partes”, opinó López, cuyo barco está atracado en la isla San Andrés a la espera de que su “patrón” decida si ante los temores de los trabajadores isleños de ser interceptados por buques nicaragüenses será mejor volver a Honduras y abandonar el negocio del crustáceo en Colombia.
La CIJ tomó el 19 de noviembre una decisión salomónica en el litigio marítimo colombo-nicaragüense, por la que confirmó la soberanía de Colombia sobre las islas y siete cayos y otorgó a Nicaragua un espacio de entre 70.000 y 90.000 kilómetros cuadrados de aguas que rodean el archipiélago San Andrés.
Esta nueva situación afecta a los trece barcos hondureños, que como el de López, faenan desde hace décadas en el mar de San Andrés contratados por colombianos.
El capitán advirtió que en este problema están involucrados Honduras, Jamaica, Panamá, Costa Rica y todos los del Caribe del oeste, pues de alguna manera también cambian sus respectivas fronteras con Colombia y Nicaragua y se ven afectados los tratados de pesca bilaterales.
El fallo sobre Colombia y Nicaragua crea además otro escenario de incertidumbre: el de los barcos de bandera extranjera autorizados desde Managua para faenar en sus aguas y que no saben cuándo podrán hacerlo en el área que todavía tiene soberanía colombiana de facto.
Por el momento, la postura del presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, es que no acatará el fallo hasta que estén garantizados los derechos de los ciudadanos de su país, por lo que mantiene la vigilancia sobre la franja adjudicada a Nicaragua.
Santos y su homólogo de Nicaragua, Daniel Ortega, se reunieron el sábado, en México, para buscar una salida negociada al conflicto fronterizo que se ha agravado tras la sentencia del Tribunal de la ONU, con sede en La Haya.