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Europeos pagarán $ 84,79 por residir en Reino Unido

Una mujer que se opone al "brexit" protesta fuera del Parlamento en Londres (Reino Unido).
Una mujer que se opone al "brexit" protesta fuera del Parlamento en Londres (Reino Unido).
Foto: EFE
22 de junio de 2018 - 00:00 - Redacción y agencias EFE Y AFP

Los europeos que lleven cinco años viviendo en Reino Unido tendrán que pagar 65 libras ($ 84,79 o 73 euros), dar su nombre y dirección y demostrar que no tienen antecedentes penales graves para optar al “estatus de asentado”. De esta forma permanecerán de manera ilimitada en el país tras el “brexit” (retirada del país de la Unión Europea, UE).

Los menores de 16 años solo pagarán 32,50 libras ($ 43,23 o 37,22 euros).

El Ministerio del Interior británico publicó este jueves 21 de junio una Declaración de Intenciones (SOI, por sus siglas en inglés), en la que adelantó los detalles de cuál será la situación de los europeos una vez se materialice la salida de Reino Unido del bloque europeo, el próximo 29 de marzo de 2019.

A partir de esa fecha comenzará el período de transición acordado por Londres y Bruselas, que finalizará el 31 de diciembre de 2020, y durante el cual los ciudadanos europeos deberán solicitar el “estatus de asentados” o el de preasentados, si no han cumplido cinco años de estancia en Reino Unido.

Los ciudadanos que obtengan este último estatus podrán continuar en Reino Unido hasta que cumplan los cinco años, momento en el que deberán solicitar el de asentados.

Según el documento, se considerará que alguien ha vivido de forma permanente durante ese tiempo, si no ha viajado al extranjero durante más de seis meses en un período de un año.

El Ejecutivo conservador explicó que el plazo para solicitar ambas categorías se prolongará hasta el 30 de junio de 2021 y, las personas que lo obtengan serán tratadas como ciudadanos británicos en lo que respecta a la asistencia sanitaria, educación, beneficios y pensiones.

“Los ciudadanos de la UE hacen una gran contribución a nuestra economía y a nuestra sociedad. Son nuestros amigos, familiares y colegas, y queremos que se queden”, declaró la ministra de Inmigración, Caroline Nokes.

Además, los familiares de estas personas que vivan en otro país podrán viajar a Reino Unido incluso cuando termine el período de transición, siempre y cuando la relación de parentesco existiera antes del 31 de diciembre de 2020 y continúe existiendo una vez esa persona se traslade al país. Asimismo, para obtener el estatus no será necesario estar trabajando o estudiando, simplemente residir en Reino Unido.

El Ejecutivo de Theresa May espera que más de tres millones de ciudadanos europeos hagan esta solicitud una vez esté disponible, previsiblemente a finales de año. La aplicación, que estará disponible en los 23 idiomas de la UE, se podrá hacer en línea a través de la página del Ejecutivo (GOV.UK) o de una aplicación para el teléfono móvil.

El Ministerio del Interior estudiará y dará respuesta en el “menor tiempo posible”, afirmó el ministro de esta cartera, Sajid Javid. (I)

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La UE exige una frontera abierta para Irlanda

El presidente de la Comisión Europea, Jean Claude Juncker, aseguró que cualquier acuerdo de salida entre Reino Unido y la Unión Europea (UE) debe incluir una solución para la frontera norirlandesa tras el “brexit”.

“Quiero dejar claro de nuevo que Irlanda no está sola. Tiene el respaldo de los 26 estados miembros y de la comisión, y eso no va a cambiar”, declaró el líder comunitario tras entrevistarse en Dublín con el primer ministro irlandés, Leo Varadkar.

Según Juncker, el futuro de la frontera no “es un asunto bilateral” entre Irlanda y Reino Unido, sino entre toda UE y el gobierno de la primera ministra británica, Theresa May.

“Estoy en contra de cualquier intento de aislar a Irlanda”, subrayó Juncker.

Varadkar solicitó a las partes que “intensifiquen” sus esfuerzos negociadores porque “no queda mucho tiempo” para “cerrar un acuerdo que esté operativo” en el momento que Reino Unido abandone la UE el próximo marzo.

El mantenimiento de una frontera abierta entre Irlanda del Norte y la República de Irlanda después del “brexit”, clave para sus economías y el proceso de paz, es uno de los asuntos espinosos de las conversaciones que mantienen ambas partes, que esperan avanzar en la cumbre comunitaria de la próxima semana. (I)

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