Hoy se asignará a 150 diputados
Europa pone su mirada en la elección de los holandeses
Ámsterdam.-
Los holandeses irán hoy a las urnas en una elección general que será el barómetro sobre el populismo en Europa: Francia elegirá presidente en abril y Alemania seguirá sus pasos en septiembre.
En Holanda hay dos grandes bloques; el primero es el partido liberal de centroderecha (VVD), liderado por el actual primer ministro Mark Rutte, mientras que el segundo es el Partido de la Libertad (PVV), considerado como xenófobo y encabezado por el populista Geert Wilders, bautizado como “el Donald Trump de la región”.
De acuerdo a los sondeos, tras estos comicios, el Parlamento holandés estará más fragmentado que nunca; serán necesarios entre cuatro y cinco partidos para llegar a los 76 escaños (de un total de 150 diputados) que otorgarían estabilidad al futuro gobierno. De entrada, la mayoría de las formaciones que concurren rechazaron futuros pactos con Wilders, incluyendo el partido del primer ministro Rutte.
En contexto, las campañas europeas de este año están dominadas por candidatos populistas que prometen frenar la inmigración -causada por los desplazamientos de la guerra en Medio Oriente y África- y ponen en riesgo la adhesión de sus naciones a la Unión Europea (UE) siguiendo el ejemplo del Brexit (salida de Gran Bretaña del bloque).
Justamente es el ascenso del populismo en los últimos años la causa principal de esa polarización del sistema político de Holanda, lo que refleja la insatisfacción social entre sus ciudadanos. De acuerdo al portal de noticias alemán DW, incluso si Wilders obtuviese más votos que Rutte, es poco probable que sea el próximo primer ministro.
Durante su campaña, Wilders prometió frenar la inmigración desde países musulmanes, cerrar las mezquitas, prohibir el burka y encarcelar de forma ‘preventiva’ a los musulmanes radicales que no han cometido crímenes; además, un referéndum para salir de la UE.
De ganar, este sería el tercer mandato de Rutte, quien durante su gestión ha dado estabilidad económica a su nación. (I)