Estrasburgo, el bazar de Adviento, sigue en la mira del terrorismo
El mercadillo de Navidad de Estrasburgo, en el este de Francia, es considerado el bazar de Adviento más antiguo de Europa. Cada año acoge a dos millones de visitantes de todo el mundo, razón por la que cual está familiarizado con las amenazas terroristas.
Precisamente este es el lugar donde tres personas fueron abatidas y una docena resultaron heridas el martes por un sospechoso que huyó.
Según el ministro del Interior, Christophe Castaner, la Policía maneja la hipótesis de un acto terrorista ya que, según testigos, el autor gritó: “Alá es grande”.
Este mercado data de 1570 y nació como apuesta del protestantismo dominante en la germánica Estrasburgo frente al catolicismo que celebraba el mercado de San Nicolás (Klausenmärik) el 6 de diciembre.
Ya en aquellos tiempos, se vendían allí pan de especias y abetos. Hoy, los productos más solicitados son los bredele (pastas de Navidad alsacianas), el “vin chaud” (vino caliente condimentado con especias) y las “baguettes flambées” (pan con queso blanco, crema líquida, yema de huevo, sal, pimienta, cebolla y beicon al horno).
En 2000 este sitio, que genera en la economía local 250 millones de euros, se convirtió en uno de los primeros objetivos de Al Qaeda. Desde entonces los dispositivos de seguridad son impresionantes.
Para este 2018, todas las animaciones estaban reunidas en la Gran Isla de Estrasburgo con un perímetro de protección. Las medidas siguen las disposiciones de la ley del 30 de octubre de 2017 para reforzar la seguridad interior y la lucha contra el terrorismo.
El tiroteo del martes
Por el ataque de este martes se suspendieron varios eventos, ya que el Gobierno incrementó el nivel de alerta antiterrorista. Los disparos se registraron, a las 20:00 locales, a escasos metros de las plazas Gutemberg y Kléber, que estaban concurridas en el momento de los hechos.
El autor del ataque intercambió tiros con soldados, apostados en el lugar, y se fugó pese a resultar herido.
Un trabajador de la Brasería Max, cerca del lugar de los hechos, indicó que escuchó ruidos que parecían “petardos o disparos” y que se repitieron varias veces.
Ante la emergencia, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, se desplazó ayer hasta la célula de crisis interministerial activada por el Ministerio del Interior para seguir la evolución de la situación tras el tiroteo.
La prensa francesa asegura que el autor, ahora prófugo, es un delincuente común, identificado por la policía como Chérif C., de 29 años, que fue adoctrinado por los yihadistas.
La Policía antiterrorista lo investiga por asesinato en relación con una organización terrorista, así como por asociación de malhechores terroristas criminales, indica la fuente judicial.
Un objetivo de Al Qaeda
Desde los atentados yihadistas de París en noviembre de 2015, con 130 muertos, el mercado de Navidad estrasburgués ha vivido cada año con esa amenaza.
Pero la alerta se dio el 26 de diciembre de 2000, como recoge el diario Dernières Nouvelles d’Alsace, cuando fue desarticulado un comando de Al Qaeda de cuatro individuos de origen argelino y residentes en Fráncfort (Alemania) que planeaba un atentado en estas fechas.
El cerebro de la operación, Mohammed Bensakhria, fue detenido meses después en España y extraditado a Francia. (I)