Solo cuatro de cada 10 estadounidenses apoyan la posibilidad de que su país lleve a cabo una intervención militar contra Siria como respuesta al presunto uso de armas químicas, pero 50% está a favor de un bombardeo selectivo, según un sondeo publicado este viernes.

Un 42% de los encuestados respalda una acción militar estadounidense en respuesta al supuesto ataque químico del 21 de agosto a las afueras de Damasco, mientras que el 50% la rechaza, de acuerdo con un sondeo realizado sobre 700 personas entre el 28 y 29 de agosto por la cadena NBC News, con un margen de error de 3,7 puntos.

Sin embargo, la mitad de los estadounidenses afirma que apoyaría una intervención de las fuerzas armadas de su país "si se limita a un bombardeo con la ayuda de misiles de crucero", frente a un 44% que rehúsa esta opción.

Esta pregunta fue formulada unicamente a 291 personas. Por otra parte, cerca de seis de cada diez encuestados (58%) aseguran que el uso de armas químicas supone una "línea roja que requiere una respuesta estadounidense significativa, que puede ser bajo una acción militar", frente al 35% que se oponen.

Una amplia mayoría (79%) afirma que espera que el presidente Barack Obama obtenga la autorización del Congreso antes de lanzar una intervención contra el régimen de Bashar al Asad.

La ley estadounidense requiere, en teoría, que el Congreso avale todo despliegue duradero de las fuerzas armadas en el extranjero.

Sin embargo, los mandatarios estadounidenses siempre han considerado que disponen del poder constitucional para iniciar operaciones militares sin la aprobación de los congresistas.

Solo el 21% de los encuestados considera que una intervención favorecería los intereses de Estados Unidos, ante el 33% que se opone y el 45% que no respondió, mientras que el 27% cree que una acción serviría para mejorar la situación de los civiles sirios, frente al 41% que no lo comparte y el 31% que no ofreció respuesta.