En Siria utilizan a palomas mensajeras para comunicarse
Al menos cuarenta personas murieron ayer en Siria, la mayoría en los bastiones opositores de Idlib y Homs, por los bombardeos y disparos de las fuerzas leales al régimen de Bashar al Asad, según un grupo opositor.
Los Comités de Coordinación Local informaron que estas provincias fueron blanco de nuevos bombardeos que causaron la muerte de 9 personas en Idleb y 8 en Homs.
En esta última ciudad que se encuentra aislada, sus militantes decidieron recurrir a un método ancestral para comunicarse: las palomas mensajeras, que hacen el trayecto entre los distintos barrios transmitiendo las últimas noticias.
“Que Dios esté contigo, que Dios te guíe hacia Baba Amr” (barrios bombardeados por fuerzas del ejército sirio), gritó Omar en el tejado de su casa al lanzar una paloma al cielo de Homs, según videos difundidos por Internet.
Este militante del barrio de Baba el Sbaa enrolló un mensaje con la ayuda de un hilo azul a la pata de una paloma, con la esperanza de que los habitantes de Baba Amr, situada a dos kilómetros de distancia, la reciban.
Mientras tanto, el gobierno sirio rechazó ayer las acusaciones del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos sobre supuestos “crímenes contra la humanidad” de este país del Medio Oriente.
En un comunicado oficial, el Ministerio de Relaciones Exteriores acusó a esa dependencia del organismo mundial de falta de neutralidad y objetividad sobre el tema. “El Alto Comisionado de la ONU se ha convertido en instrumento en manos de ciertos países que tienen como objetivo a Siria e ignoran los crímenes terroristas que perpetran grupos armados”, añade la nota. La cancillería denunció que el mecanismo de la ONU descartó los intentos sirios de ofrecer información sobre la situación real en el país.
El lunes, la alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Navi Pillay, estimó que las fuerzas sirias habían cometido crímenes contra la humanidad en su represión de la revuelta popular.
“Informaciones independientes, creíbles y corroboradas indican que esos abusos forman parte de una campaña amplia y sistemática de agresión contra los civiles”, expresó la funcionaria tras estimar que eran perpetrados con el aval o la complicidad de las autoridades al más alto nivel.
Navi Pillay se declaró particularmente consternada por la violencia en Homs y estimó que más de 300 personas habían muerto en esta ciudad del centro del país durante los bombardeos de zonas residenciales.
Desde el comienzo, en marzo de 2011, de la revuelta en Siria, el régimen del presidente Bashar Al Asad acusa a bandas armadas de sembrar el caos y de haber provocado la muerte de civiles.