El principal sindicato italiano, la CGIL, fijará el 23 de agosto una fecha para realizar una huelga general contra el “injusto” nuevo plan de austeridad adoptado el viernes por el gobierno de Silvio Berlusconi, según declaraciones del sindicato publicadas por un diario italiano.

“El 23 de agosto tendrá lugar una reunión extraordinaria (...) de la CIGL para decidir en qué fecha nos movilizaremos”, declara la secretaria general del sindicato, Susanna Camusso, al diario La Repubblica.

“No veo de qué otro modo podemos oponernos a este plan de rigor injusto”, estimó. Con este nuevo plan de austeridad que prevé economizar unos 45.500 millones de euros en dos años, el Gobierno espera poner fin a los ataques especulativos en los mercados financieros contra Italia.

Estas nuevas medidas se suman a las adoptadas a mediados de julio por el Parlamento por un total de unos 48.000 millones de euros. El plan responde a los pedidos de los socios europeos y del BCE, que condicionó el apoyo a Italia a través de la compra de obligaciones del Estado a la aprobación de nuevas medidas de austeridad.

A inicios de este mes, en medio de la crisis de la deuda, España e Italia anunciaron unas débiles cifras de crecimiento, complicando así una mejora de sus déficits y aumentando los temores a una extensión de la crisis de la deuda en la Eurozona.