En China se le permite a Ai Weiwei ver a su esposa en encuentro breve
Las autoridades chinas, que tienen detenido al artista disidente Ai Weiwei desde el pasado 3 de abril, le permitieron mantener un breve encuentro con su mujer, bajo presencia policial, informó este lunes un familiar del desaparecido.
"Ayer por la tarde la esposa de Ai Weiwei, Lu Qing, pudo encontrarse con él en una visita pactada", señaló a Efe Gao Ge, la hermana del artista, en conversación telefónica.
Se trata del primer contacto que mantiene Ai con el mundo exterior desde su detención.
Lu Qing, de la que Ai está separado desde hace años pero con la que mantiene una relación amistosa, explicó a la familia tras el encuentro que el artista tiene buen aspecto.
"Parece que está bien de salud, no ha perdido mucho peso y no ha sido maltratado. Además está tomando las medicinas que necesita", dijo.
La visita ha calmado a la familia, después de que algunas organizaciones de derechos humanos publicaran una carta de un periodista de Xinhua firmada con pseudónimo en la que aseguraba que Ai podría estar siendo torturado durante su detención.
Gao expresó también su satisfacción al saber que el diseñador del Estadio Olímpico toma la medicación que necesita para controlar la diabetes y la alta tensión sanguínea que padece.
Ai, de 53 años, preguntó en dos ocasiones por la salud su madre, Gao Yin, de 78 años, y Lu le dijo que toda la familia se encontraba bien, incluido el hijo de dos años que el artista tiene con su actual pareja sentimental, Wang Feng, y le explicó que se reunían muy a menudo entre ellos.
"Lu no recuerda cuánto tiempo estuvo con él porque estaba muy emocionada. Tampoco sabe exactamente dónde se reunieron, porque la policía la citó en la comisaría y de allí la llevó en automóvil a un lugar indeterminado de Pekín", explicó Gao, hermanastra mayor del artista.
Aunque los familiares desconocen qué va a suceder a partir de ahora, están muy felices por el encuentro del domingo por la tarde.
"Nos alegra porque es un avance, aunque no es el resultado que esperamos. Deseamos que dé comienzo cuanto antes el proceso jurídico", agregó Gao, ya que la detención de su hermano ha superado el plazo legal en China sin que medie una orden formal de arresto ni acusación.
En esta situación la familia tampoco puede contratar un abogado ni emprender acciones legales.
Las autoridades chinas aseguran que Ai está siendo investigado por un supuesto delito económico, pero la familia está convencida de que su detención está vinculada con el abierto activismo que el artista practica tanto en su vida pública como en su obra.
"Estamos muy contentos con este avance, y vamos a seguir esforzándonos para poder velo", manifestó la hermana.
Después del encuentro de Ai con su esposa, tanto la familia como abogados y observadores creen que éste no se encuentra en un centro de detención ni en la cárcel, sino que podría permanecer retenido en un domicilio, por lo que en tal caso, y según la ley china, no hay obligación de emitir una orden de detención formal.
"Creemos que no está en una cárcel, pero no podemos confirmarlo", explicó Gao.
La detención de Ai Weiwei es la de mayor nivel entre los centenares de activistas, disidentes, intelectuales, abogados y artistas que han sido detenidos desde febrero por el régimen chino, cuando desde internet se instó a emular en China de forma pacífica la llamada "primavera árabe".
Museos de todo el mundo, gobiernos occidentales y organizaciones de derechos humanos han protestado en los últimos 43 días por la detención de Ai, uno de los artistas contemporáneos chinos más famosos en el extranjero.
Este mes se inauguró una exposición suya en Nueva York a pesar de su ausencia.
Numerosas voces del mundo de la cultura han pedido la liberación del artista, como el escritor angloindio Salman Rushdie, quien tuvo que pasar años en la clandestinidad tras la publicación de su libro "Los versos satánicos".