El jefe de negociadores del Ejército de Liberación Nacional (ELN), Pablo Beltrán, dijo ayer que la guerrilla tiene el compromiso de hacer la paz y que esa es la disposición con la que acudirá a los diálogos que iniciará con el Gobierno colombiano en Quito, tentativamente la próxima semana.

“Nosotros venimos con disposición de pactar, de negociar, de acordar, de ceder en cosas. A lo que nosotros nos oponemos es a que siempre este gobierno nos coloque de malo”, aseguró el comandante guerrillero en entrevista con la emisora colombiana Blu Radio.

Sobre la eventual liberación del excongresista Odín Sánchez, que el ELN tiene en su poder y que impide  se instale la mesa de negociaciones en Quito, afirmó que esta ya se encuentra en proceso y que el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) colabora en esa tarea en las selvas del occidental departamento del Chocó.

La mesa pública de diálogos con el ELN se iba a instalar el jueves en la tarde en Quito, pero la ceremonia fue aplazada porque la liberación de Sánchez -condición del Gobierno colombiano- no se produjo.

Beltrán señaló que el acuerdo con el gobierno fue “hacer gestos” humanitarios de lado y lado para iniciar los diálogos, y uno de ellos era liberar al exrepresentante de la Cámara, pero nunca se habló de “una fecha explícita” para que ocurriera.

Agregó que, aun así, desde el pasado domingo una estructura del ELN en el Chocó contactó al CICR para iniciar el proceso de liberación de Odín, quien está en manos de la guerrilla desde abril pasado, cuando se “canjeó” por su hermano Patrocinio, quien estaba 2 años y 7 meses secuestrado. “Nosotros cumplimos y   seguiremos cumpliendo, así el gobierno no lo haga”, dijo el comandante insurgente.

El jueves, cuando el jefe de negociadores del gobierno con el ELN, Juan Camilo Restrepo, dio a conocer el aplazamiento de la instalación de los diálogos con la guerrilla en Quito, señaló que ya tenía la confirmación del CICR de que trabajaba en la logística para liberar a Sánchez. “El gobierno celebra este hecho, y toma nota de este procedimiento que espera que concluya satisfactoriamente antes del 3 de noviembre, fecha acordada para  iniciar la primera ronda formal de negociaciones”, señaló Restrepo, y reiteró que el diálogo se iniciará cuando Odín regrese a casa “sano y salvo”.

Fuentes del gobierno consultadas por EL TELÉGRAFO dijeron que el propósito es que el jueves se instalen los diálogos, “pero eso será si Sánchez es liberado antes de esa fecha”.

Negociar en medio de la guerra

Como un aviso de los hechos que pueden perturbar el proceso de negociaciones con el ELN, la tarde del jueves, hombres de la guerrilla asesinaron con tiros de gracia a los conductores de dos vehículos de carga que circulaban por una carretera en el oriental departamento de Arauca.

Ante la condena que ha recibido ese hecho, Pablo Beltrán dijo que los diálogos de paz son precisamente para que hechos de este tipo dejen de ocurrir.  

De acuerdo con el jefe guerrillero, los primeros puntos de la agenda  serán el de participación de la sociedad en la construcción de la paz y el de acciones humanitarias.

Este último, explicó, servirá para analizar todos los problemas derivados del conflicto armado, como el hecho en Arauca.“Desde el principio les dijimos a los delegados del gobierno del presidente Juan Manuel Santos: es mejor hacer el diálogo en medio de un cese bilateral. Y el gobierno siempre se ha negado a eso, entonces el que puso las condiciones fue el gobierno de Santos, no, nosotros”, afirmó.

El comandante del ELN señaló que el pueblo colombiano ha sufrido mucho desde el asesinato de Jorge Eliezer Gaitán, en abril de 1948, y pidió a los medios de comunicación reflejar por igual los asesinatos de dirigentes sociales que cometen las estructuras paramilitares.

“Los dolores de todos los colombianos son iguales, no hay unos que valgan más que otros, todos somos colombianos, y esta mesa de diálogo es para eso”.

Pablo Beltrán aseguró que la disposición del ELN es no levantarse de la mesa que se instalará en Quito hasta que haya un acuerdo final, aunque aclaró que ese grupo insurgente no tiene afán de lograr un pacto muy pronto. “No es solo que el acuerdo esté listo antes de que el presidente Santos se vaya (2018)”, precisó.

El jefe guerrillero explicó que el ELN está dispuesto a pedir perdón por los excesos cometidos en medio de la guerra. “Cada vez que nosotros hemos tenido situaciones en que consideramos que nos hemos equivocado, lo hemos reconocido y hemos pedido perdón”, señaló.

Sobre el número de secuestrados que tiene el ELN en su poder, dijo que son “muy poquitos” y justificó esa práctica como una manera de financiar la guerra. “Nosotros, como el gobierno, también cobramos impuestos, uno no vive de estampitas. La guerrilla debe  tener unos ingresos y se cobran impuestos”, señaló.

Pablo Beltrán abundó al respecto en una entrevista publicada ayer en el diario español Gara y en la que dijo que el ELN está dispuesto a debatir el tema de los secuestros en la mesa de negociaciones, una vez que se inicie la ronda en Quito.

“Es un tema complejo porque como insurgentes tenemos derecho a privar de la libertad por diversas razones propias del conflicto. En estos términos, el asunto de fondo por debatir es el derecho a la rebelión, y cuando se trata, como en este proceso, de buscar una solución política, el corazón del problema está en resolver las causas que originan la rebelión”, aseveró.

Sobre las víctimas, dijo que “quien pone los muertos en un conflicto es el pueblo, los de la élite no mandan a sus hijos a la batalla, por eso muchos de los súper ricos están cómodos y piden que la guerra siga”. Las víctimas, agregó, son del pueblo.

“Solo los desplazados suman siete millones, más que en Siria o Ruanda, y dos terceras parte son mujeres. Hay que ser insensibles para no valorar la dimensión de este sufrimiento y para no comprometerse a resolverlo de raíz”, puntualizó.

El tema de víctimas será abordado por el ELN y el Gobierno colombiano como parte del punto número 4 de la agenda de negociaciones. (I)

DIÁLOGOS CON LAS FARC

El Gobierno de Colombia y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) retomarán el diálogo para lograr un nuevo acuerdo de paz el 3 de noviembre.

El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, exigió la presencia del jefe negociador de la paz por parte del gobierno, Humberto De la Calle, y del alto comisionado por la paz, Sergio Jaramillo, para iniciar una reunión hoy con las fuerzas del ‘No’, lideradas por el uribismo.

Santos advirtió: “El cese al fuego que pactamos es frágil por eso necesitamos un nuevo acuerdo ya”. El mandatario pidió a su equipo negociador ponerse en “modo cónclave” para que logren elaborar pacto que contengan las preocupaciones viables de aquellos que pidieron modificar el Acuerdo de Paz original, rechazado el pasado 2 de octubre en un plebiscito.

Iván Márquez, máximo jefe de las FARC, indicó que “ojalá la dilación no se convierta en un bumerán”, refiriéndose a la negativa del expresidente Álvaro Uribe de reunirse con el Gobierno colombiano. (I)

---------------------------------

ELN pide $ 1 millón para liberarlo

Odín Sánchez es clave para los diálogos

Odín Sánchez Montes de Oca tiene 61 años y es oriundo del selvático y remoto Chocó (en el noroeste), el departamento más pobre de Colombia. Abogado de la Universidad Libre de Colombia en Bogotá, dedicó su vida a la carrera política y siguió el camino labrado por generaciones de su familia en la región.

Empezó su carrera política como diputado de la asamblea departamental del Chocó y  posteriormente fue concejal de Quibdó,  capital regional. En ambos casos obtuvo “las mayores votaciones”, contó su hermano, Patrocinio Sánchez, gobernador del Chocó entre 2006 y 2010.

En abril, Odín se intercambió por su hermano enfermo Patrocinio. La guerrilla exigía el pago de 3.000 millones de pesos ($ 1 millón) por la liberación del exgobernador, un monto que aún pide para soltar a Odín.

A la fecha hemos entregado “más de 1.000 millones de pesos ($ 340.000)” para la liberación de Odín”, sostuvo Patrocinio quien fue alcalde de la capital regional Quibdó entre 2001 y 2003. (I)