El pueblo cubano recibirá este fin de semana al papa Francisco con “respeto, afecto y hospitalidad”, afirmó  ayer el diario oficial Granma en un editorial, en el cual señala que la visita a Cuba del Sumo Pontífice confirmará el buen estado de las relaciones entre el gobierno y la Santa Sede.

El papa Francisco llegará el sábado a la isla, recorrerá y oficiará misas públicas en La Habana, Holguín y Santiago de Cuba. Se quedará en la nación caribeña hasta el martes, cuando emprenderá su viaje a Estados Unidos, donde visitará Washington, Nueva York y Filadelfia. El 28 de septiembre regresará al Vaticano.

En Cuba, Francisco dará una misa en la Plaza de la Revolución el próximo domingo, y luego se reunirá “en un encuentro privado” con el presidente cubano, Raúl Castro. Luego  podría reunirse con Fidel Castro, afirmó ayer el vocero vaticano Federico Lombardi, quien indicó que un encuentro entre ambos líderes “es del todo verosímil”.

“Es previsible que se realice en el curso de la jornada en La Habana”, agregó el vocero, quien precisó que “por ahora no está en agenda un encuentro, pero es posible”.

Será la tercera vez que un Papa visite la isla en menos de 20 años, después del arribo de Juan Pablo II en 1998 y de Benedicto XVI en 2012, pero, según expertos, el máximo líder de los católicos es el que más influencia ha tenido en la Cuba de hoy. Ya antes de su llegada a la isla, y quizá como signo de su influencia, las autoridades cubanas anunciaron la liberación de más de 3.500 presos comunes, lo que representa la cifra más alta de reos puestos en libertad desde 1959.

Muchos atribuyen la decisión al enorme papel que el papa Francisco ha jugado en el deshielo entre Estados Unidos y Cuba, anunciado en diciembre pasado, que logró además la puesta en libertad del subcontratista estadounidense Alan Gross.

Lo cierto es que, según Tomás Bilbao, director ejecutivo del Cuba Study Group, el papa Francisco llegará a la isla en momentos en que Cuba ha iniciado un proceso de reformas, que si bien son pequeños pasos frente a los retos que afronta el país caribeño, eran impensables hace unas décadas.

Si bien el viaje pastoral a Cuba tendrá un enfoque sobre la familia y la juventud, el Papa ha hecho fuertes pronunciamientos sobre los derechos humanos y la dignidad de las personas, y con seguridad retomará el tema de las injusticias “tanto del autoritarismo político como del capitalismo sin frenos”, observó William LeoGrande experto político en American University.

Por otro lado, el padre Lombardi afirmó que “no se espera” que el papa Francisco se reúna con representantes colombianos en su próximo viaje a Cuba, después del pedido de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), en el marco de las negociaciones de paz que se han entablado con el gobierno colombiano. (I)

Policía de EE.UU. se prepara para histórica visita

La visita del papa Francisco a Estados Unidos después de su paso por Cuba supone un desafío de seguridad inédito para las autoridades.

Los servicios secretos estadounidenses serán los responsables en primer lugar de la seguridad del papa durante su estadía en el país entre el 22 y 27 de septiembre próximos, con escalas en Washington, Nueva York y Filadelfia.

Además de sus recorridos a la Casa Blanca y el Congreso en Washington o la sede de Naciones Unidas en Nueva York donde dará un discurso en español, el Papa tiene previstas misas multitudinarias en las tres ciudades, la última de ellas en Filadelfia al aire libre y con una concurrencia estimada por los organizadores en 2 millones de personas.

En Nueva York, donde el Sumo Pontífice estará el jueves 24 a la tarde y todo el viernes 25, las autoridades no dudaron en calificar el evento como “el desafío en materia de seguridad más grande que jamás haya enfrentado el departamento de policía de la ciudad”, según las palabras del jefe de la Policía, Bill Bratton.

El alcalde Bill de Blasio coincidió: “Nunca antes hemos visto algo como esto”, al referirse a la visita del Papa y la presencia de 170 líderes mundiales para la Asamblea General de la ONU del 25 de septiembre al 6 de octubre. Sin embargo, el Vaticano minimizó los riesgos. “No existen preocupaciones especiales por la seguridad del Papa, él se va a mover libremente en papamóvil abierto”, indicó el vocero vaticano Federico Lombardi respecto a la preocupación por el Pontífice.

La policía de Nueva York y unas 50 agencias de seguridad locales, estatales y federales realizaron un simulacro con un escenario de francotiradores y explosiones. (I)