El papa Francisco pidió al mundo cooperar para que los campesinos tengan tierras, las familias posean casas y el derecho de los trabajadores sea reconocido. Al respecto, rechazó que algunos grupos lo señalen de comunista por velar por los derechos de los pobres.

El líder de la Iglesia católica lamentó durante su discurso que muchos lo tilden de comunista cuando habla de la necesidad del mundo. “Es extraño pero si hablo de esto para algunos resulta que el papa es comunista (...) no se entiende que el amor a los pobres está al centro del evangelio. Tierra, techo y trabajo, eso por lo que ustedes luchan, son derechos sagrados. Reclamar esto no es nada raro, es la doctrina social de la Iglesia”, señaló.

En la presencia del presidente boliviano, Evo Morales, que participó en el Encuentro Mundial de los Movimientos Populares en el Vaticano, el Sumo Pontífice destacó esta petición como el anhelo de toda madre para su hijo.

Destacó que el encuentro no debe verse con respuesta a “una ideología”, sino de concentrar esfuerzos para ayudar a los más pobres. “Ustedes no trabajan con ideas, trabajan con realidades (...) tienen los pies en el barro y las manos en la carne. ¡Tienen olor a barrio, a pueblo, a lucha! Queremos que se escuche su voz que, en general, se escucha poco”, reafirmó el Papa argentino.

Recordó que es de hipócritas hacer de la pobreza un escándalo para tranquilizar sus quejas.

“Ustedes sienten que los pobres ya no esperan y quieren ser protagonistas, se organizan, estudian, trabajan, reclaman y, sobre todo, practican esa solidaridad tan especial que existe entre los que sufren, entre los pobres y que nuestra civilización parece haber olvidado”, resaltó Francisco en el encuentro que duró 3 días y concluyó ayer.