El presidente boliviano reelecto, Evo Morales, llegó al 60% de los votos del cómputo oficial, con lo que se aseguró el tercer mandato de 2015 a 2020 y está a un paso de obtener el control del Congreso, informó ayer el tribunal electoral.

Morales arrolló ampliamente a la oposición al derrotarla con una ventaja de 35 puntos porcentuales sobre su escolta, el empresario centrista Samuel Doria Medina, que obtuvo el 24,98% de los sufragios, y el expresidente liberal Jorge Quiroga, con el 9,41%.

El socialdemócrata Movimiento Sin Miedo (MSM), que respaldó al abogado Juan del Granado, y el Partido Verde (PV), al indígena ecologista Fernando Vargas, corren el riesgo de perder la sigla porque ninguno ha superado el mínimo de 3% de los votos que establece la ley.

El cómputo oficial está detenido el 90,94% pues se debe volver a votar en un número no precisado de mesas impugnadas por diversas irregularidades, informó el tribunal electoral.

Un comunicado de los obispos católicos observó “denuncias de irregularidades graves en el conteo oficial de los votos”, hechos que “inevitablemente despiertan dudas y susceptibilidades sobre el proceso” electoral.

En las encuestas al 100% en boca de urna, difundidas el mismo domingo por medios privados de televisión, Morales había superado la barrera del 60%.

Cuando aún falta el 10% de los cómputos, el Movimiento Al Socialismo (MAS) avanza también hacia el control de los 2 tercios del Congreso bicameral. Obtuvo 25 de 36 senadores y 86 de 130 diputados. Es decir el control del Senado es casi un hecho, pero todavía le falta un escaño para conseguir los 2 tercios en la Cámara de diputados.

Unidad Demócrata (UD), del empresario Samuel Doria Medina, accedió a 9 senadores y 32 diputados; y el Partido Demócrata Cristiano (PDC), del expresidente liberal Jorge Quiroga, a 2 senadores y 10 diputados. El MSM y el Partido Verde  obtuvieron un diputado cada uno.

Morales, en el período constitucional 2010-2015, tuvo el control absoluto del Parlamento y pudo aprobar medidas estructurales.

Destaca legitimidad

Morales aseguró ayer que la democracia boliviana es legítima y advirtió que se acerca a los patrones comunales que rigieron en el país antes de la llegada de los españoles el 12 de octubre de 1492.

En conferencia de prensa desde la central ciudad de Cochabamba, el jefe de Estado insistió en la legitimidad del proceso, pero aclaró que es importada. “Esa democracia de mayorías y minorías llegó el 12 de octubre de 1492. La democracia comunal es de mayoría, de consenso”, dijo.

Por otra parte, recordó que “los 2 tercios conseguidos por el Movimiento Al Socialismo (MAS) hacen que la democracia boliviana se acerque a la democracia comunal”.

El primer presidente indígena de Bolivia justificó las aspiraciones de conseguir el 74% en las pasadas elecciones como una aspiración más, “es parte de nuestro grito de guerra. Uno siempre quiere más. Uno dice vamos a seguir subiendo. Los opositores decían que iba a haber fraude y que iban a dar sorpresas. Y no hubo ni fraude ni sorpresas. Estamos en contacto con los pueblos”, enfatizó.

También hizo referencia a los derechos constitucionales de la oposición y aclaró que “tienen intenciones (el excandidato de Unidad Demócrata, Samuel) Doria Medina y (el expresidente Jorge) Tuto Quiroga de volver al pasado. Pero el pueblo boliviano ya no quiere volver al pasado”.

“Los opositores, todos, han planteado entrar a la Alianza del Pacífico. Y recordemos que la Alianza del Pacífico plantea la privatización de los servicios básicos. Doria Medina, que era dueño o accionista de Aguas del Tunari, quiere entrar a la Alianza del Pacífico para privatizar, lo mismo quería Tuto Quiroga”, recalcó.

Al mismo tiempo, advirtió que su partido defiende el agua como un derecho humano, y criticó las posiciones opositoras que, insistió, solo se dedicaban a “rechazar, rechazar y rechazar y nunca a proponer”.