Abimael Guzmán, reconocido fundador y líder del grupo Sendero Luminoso, enfrenta un nuevo juicio en Perú por un atentado terrorista que en 1992 dejó 25 personas muertas.

Los hechos por los que es acusado Guzmán ocurrieron en la ciudad de Lima, en la calle Tarata, donde explotó un carro bomba dejando un centenar de heridos e innumerables daños materiales en las viviendas aledañas.

Guzmán es procesado con la cúpula de la agrupación, entre ellos la número dos de Sendero, Elena Iparraguirre (esposa de Guzmán), Óscar Ramírez, Eleuterio Flores Hala, Osmán Morote Barrionuevo, Margot Liendo Gil, Victoria Cárdenas Huayta, todos presos con penas entre 25 años y cadena perpetua.

El exlíder de Sendero Luminoso se encuentra en la cárcel purgando una pena de cadena perpetua por los delitos que cometió cuando estaba al frente del grupo terrorista.

La fiscalía solicita que los acusados sean condenados a cadena perpetua y al pago de 400.000 soles ($ 122.000) como reparación civil a las víctimas. Serán juzgados por el delito de tráfico de drogas, ya que el grupo senderista es señalado de proteger las actividades de narcotraficantes a partir de la década del 80, señala la nota.

En enero, un tribunal rechazó un pedido de Alfredo Crespo, abogado de Guzmán, de declarar nulo el juicio por prescripción. El defensor argumentó además que ya fueron condenados los autores directos del crimen, del que presuntamente la cúpula no tuvo conocimiento.

Sin embargo, la jueza Mercedes Cabello rechazó la medida al recordar que los delitos por terrorismo no caducan, y recordó que el propio Guzmán dijo que “el atentado de Tarata fue un error”.

Guzmán fundó su agrupación en 1969 bajo el nombre de Partido Comunista del Perú-Sendero e inició en mayo de 1980 lo que denominó una “guerra popular”.

La guerra de Sendero dejó 70.000 muertos entre 1980 y 2000 tras desatarse una represión militar, según un informe de la Comisión de la Verdad y Reconciliación. (I)