El “kirchnerismo” afrontará mañana, en un marco de orfandad, unas difíciles elecciones legislativas de medio término en las que aspira mantener el control del Congreso y la primera minoría nacional.

Los comicios estarán marcados por la ausencia de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, que se recupera de una operación por un hematoma craneal realizada el 8  de octubre pasado en una clínica privada de Buenos Aires. La mandataria cumple reposo absoluto por recomendación médica y ni siquiera es informada de los asuntos oficiales, por lo que ha estado fuera de la recta final de la campaña.

Pero estas elecciones tendrán el condimento extra, pero puramente simbólico, de celebrarse en el tercer aniversario de la muerte del ex presidente Néstor Kirchner (2003-2007), el 27 de octubre del 2010. Kirchner ha estado presente en los últimos días en la publicidad electoral con un “spot” que recrea, en la voz de personas comunes y reconocidos artistas, su discurso de asunción, el 25 de mayo del 2003, cuando pronunció su recordada frase “vengo a proponer un sueño”.  

Mientras la oposición anuncia que este lunes “comienza el post-kirchnerismo”, desde el oficialismo se advierte que en estas elecciones “están en juego un montón de logros” obtenidos en los últimos 10 años. “Estamos viviendo momentos muy duros, con mentiras, infamias y una campaña sucia orquestada por la oposición” y su espada mediática, dice a EL TELÉGRAFO la presidenta de la Asociación Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini,  dirigente social  muy cercana a la mandataria.

En Argentina se suele dar un fenómeno político contradictorio en las elecciones de medio término: todas las fuerzas se declaran vencedoras, ya que realizan una lectura particular del resultado de la contienda. Así, no es difícil vaticinar que el gobierno se mostrará –según los sondeos- como la primera minoría nacional y manteniendo el control del Congreso. La aspiración de muchos dirigentes, en voz baja, es que el “kirchnerismo” recoja el voto de uno de cada tres electores, 20 puntos menos que el 54% logrado en la reelección de la presidenta en 2011 pero casi igual porcentaje alcanzado en los comicios legislativos de 2009.

Sin embargo, la oposición también afila sus cartas para mostrarse ganadora. El peronismo disidente, según todos los sondeos, alcanzaría una importante victoria en la estratégica provincia de Buenos Aires, donde se libra la “madre de todas las batallas” ya que engloba al 37% del electorado nacional. Allí, el primer candidato a diputado nacional por el Frente Renovador peronista es el ex jefe de gabinete de Cristina Fernández, Sergio Massa.

De acuerdo con la última encuesta del portal Infobae, le lleva casi 10 puntos de ventaja (42,16% contra 32,21%) al postulante oficialista Martín Insaurralde. En las primarias abiertas de agosto Massa aventajó a Insaurralde por cinco puntos (34,06% contra 29,06%). Pero otras fuerzas también se preparan para declararse vencedoras: la derechista Propuesta Republicana (PRO), del alcalde porteño Mauricio Macri, ganaría en la ciudad de Buenos Aires, la centroizquierda del Frente Progresista Cívico y Social triunfaría cómodamente en la provincia de Santa Fe, tercer distrito electoral, y la Unión Cívica Radical (UCR), del ex presidente Fernando de la Rúa, se encamina hacia la victoria en la andina provincia de Mendoza.

“El oficialismo tratará de imponer la interpretación de que mejoró el resultado (en relación a las primarias) y que sigue siendo la primera minoría (a nivel nacional), 10 puntos por encima de quien le siga, que será el Frente Renovador de Massa”, dice el analista político Rosendo Fraga.

Y agrega: “la oposición buscará imponer la interpretación de que ha ganado en los principales distritos y buscará comparar los resultados con la elección de 2011. El problema para imponer esta interpretación es su división, ya que en la provincia de Buenos Aires y en Córdoba (primer y segundo distrito electoral respectivamente) se impondrán (distintas) expresiones del peronismo disidente; en Santa Fe una coalición con eje en el socialismo, en Mendoza el radicalismo y en la ciudad de Buenos Aires una expresión de centro-derecha como el PRO”.

Pero ¿que votarán este domingo los argentinos? En concreto, se renovará la mitad de los miembros de la Cámara de Diputados (127, 35 de ellos en la provincia de Buenos Aires) y un tercio de los del Senado (24).

En la Cámara de Diputados, según un informe del sitio digital Parlamentario.com, el oficialista Frente para la Victoria mantendrá 77 diputados nacionales que tienen mandato hasta 2015 (a otros 33 se les vence en diciembre). De acuerdo con sondeos sumaría este domingo 40 diputados. De esa manera lograría un bloque de 117 miembros, siete más de los que actualmente tiene. Además habría que sumarle 14 diputados aliados, con lo que llegaría a las 131 bancas. El quórum se alcanza con 129 votos. La oposición posee hasta hoy 114 diputados de distintas tendencias.

En el Senado, el “kirchnerismo” conserva 21 bancas que no deben renovarse ahora. Y lograría 11 este domingo –según Parlamentario.com- para un total de 32. Además, tendría seis aliados y otros dos más ocasionales. El quórum se logra con 37 votos. Pero según Fraga, que tiene una lectura diferente, en el Senado el oficialismo nacional podría perder hasta tres bancas y otras tantas en diputados. Aun así, en ambos casos mantendría -sumando a sus aliados- “un quórum ajustado”, reconoce. Muchos argentinos de tendencia opositora creían que el oficialismo perdería su mayoría en el Congreso pensando en una merma de 20 puntos de respaldo en estas elecciones en relación a las presidenciales de 2011.

Pero el “kirchnerismo” debe renovar en diputados bancas ganadas en los comicios de medio término de 2009, en los que no obtuvo una gran elección, por lo que el caudal de escaños no sufriría grandes cambios. En el Senado se renuevan bancas ganadas en el 2007, por lo que el grado de dificultad es mayor para el oficialismo, ya que pone en juego una mayor cantidad de bancas (el 38% de su propio bloque).

Para Hebe de Bonafini, en estas elecciones la oposición “ha ensuciado mucho la cancha afirmando que todo, absolutamente todo, está mal” en el país “difamando y mintiendo”, por lo que vaticinó “dos años difíciles” hasta las elecciones de 2015. “Desafortunadamente el que tiene menos se olvida de lo que se logró” en estos 10 años de gestión de gobierno y “va detrás de papelitos de colores. Esto puede ser peligroso... Cuando ellos fueron gobierno hicieron disparates”, concluyó.

LOS ARGENTINOS PODRÁN VOTAR EN ECUADOR

Los argentinos residentes en Ecuador podrán votar este domingo para las elecciones legislativas de su país, en las oficinas de la Embajada de Argentina, ubicadas en Quito.

La Cancillería argentina, en un comunicado difundido por medios de comunicación, indicó que en sus oficinas serán habilitados recintos electorales desde las 08:00 hasta las 18:00 locales.

La Cámara Nacional Electoral de Argentina informó que podrán votar todos los ciudadanos argentinos residentes en el exterior que se hayan empadronado en el Registro de Electores Residentes en el exterior, a través de la Representación Diplomática o Consular en cuya jurisdicción reside.

En Argentina, estos comicios contarán con la participación de la funcionaria del Consejo Nacional Electoral de Ecuador, Nubia Villacís, quien viajó a Buenos Aires como observadora internacional de las elecciones en las que se renovará parte del Congreso.

Villacís fue recibida por el presidente argentino encargado, Amado Boudou. La consejera ecuatoriana, junto a funcionarios electorales de Tailandia, Francia, Angola, Portugal y América Latina, tendrá la misión de valorar la organización electoral del país.

Argentina no recibe misiones de observación electoral, pero valora  el acompañamiento de las autoridades de los organismos electorales de países amigos, ya que con su visita se fortalecen las relaciones bilaterales entre las naciones, aseguró la Cámara.

DATOS

Argentina renueva este domingo la mitad de la cámara de Diputados. Serán elegidos 127 diputados con mandato hasta 2017. En diputados, el oficialismo y sus aliados, que cuentan actualmente con quórum para iniciar la sesión, ponen en disputa 55 bancas. Las distintas fuerzas de oposición renuevan 72 escaños.

Se elige un tercio del Senado. Serán elegidos 24 senadores con mandato hasta 2019.  En la cámara alta, el oficialismo y sus aliados logran hasta ahora formar quórum y renuevan 17 bancas. Las distintas fuerzas de oposición renuevan siete escaños.

El padrón nacional es 30,5 millones de electores. Por primera vez los jóvenes de entre 16 y 18 años votan para cargos electivos (padrón de 590.000 personas).