Ningún representante de la coalición mud acudió al sepelio
El dirigente opositor asesinado afrontaba investigaciones judiciales
La representación de Venezuela en Colombia envió una comunicación a los embajadores en ese país para aclarar los hechos sobre el asesinato de Luis Manuel Díaz (foto), secretario municipal de Acción Democrática (AD), que integra la Mesa de la Unidad Democrática (MUD).
El hecho ocurrió el pasado 25 de noviembre en Altagracia de Orituco, al finalizar un mitin político encabezado por Lilian Tintori, esposa de Leopoldo López.
La misiva destaca que Díaz afrontaba investigaciones por actos delictivos y estuvo preso 3 años. Por eso todavía se investigaba su participación en actos irregulares.
En el texto, la representación diplomática rechaza las afirmaciones de Henry Ramos Allup, secretario nacional del AD, quien en redes sociales escribió que el dirigente fue asesinado “por un disparo de arma de fuego hecho por bandas armadas del PSUV (Partido Socialista Unido de Venezuela) desde un vehículo”.
La misiva resalta que, según las investigaciones, no existe algún elemento que vincule o relacione a algún dirigente del PSUV con el homicidio.
En base a esto que se deplora que representantes de organismos internacionales y de algunos gobiernos se hayan pronunciado sobre el hecho al catalogar la muerte de Díaz como un asesinato político.
Vecinos del dirigente de AD afirmaron que él no salía casi nunca de su hogar porque estaba amenazado.
La carta de la embajada resalta que al sepelio de Díaz no asistió ningún líder político de su agrupación o de la MUD.
Para las autoridades venezolanas, lo que se buscaba era incidir negativamente en los comicios legislativos que se realizaron el domingo pasado.
La embajada catalogó el tratamiento del caso como una manipulación de los hechos y se pregunta por qué no se dio el mismo tratamiento a los asesinatos de 2 líderes juveniles del chavismo, en cuyos casos sí hay una participación de integrantes políticos de oposición.
La representación diplomática recalca que esta acción refleja “actuaciones que parecieran estar vinculadas a planes desestabilizadores contra un gobierno constitucional y democrático”.
Los 2 líderes juveniles asesinados son Eleazar Hernández, estudiante de 22 años y militante de las Juventudes del PSUV, quien falleció en la Universidad de Zulia (Maracaibo).
El joven fue estrellado en una cartelera de vidrio por integrantes del partido opositor Movimiento de la Unidad y murió degollado. Mientras que Génesis Arguinzones, de 23 años, fue asesinada por un hombre asociado al partido opositor Primero Justicia. (I)