El alto al fuego en Siria condiciona acuerdo bilateral
Tras 5 años y medio de guerra civil en Siria, Estados Unidos y Rusia (que apoyan a bandos opuestos) llegaron a un nuevo cese de hostilidades en la nación árabe, que iniciará entre esta noche y madrugada de mañana (00:00), y que comprende la interrupción de todas las operaciones de combate; incluyendo los bombardeos aéreos así como el sobrevuelo de la aviación del régimen de Bashar al-Ásad sobre posiciones rebeldes (que busca destituirlo desde 2011).
El anuncio —efectuado en Ginebra— por el secretario de Estado norteamericano, John Kerry, junto con el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, y aprobado por el gobierno sirio, confirmó que si en el plazo de una semana se respeta este cese de las hostilidades ambos países procederán a ataques coordinados contra posiciones de los grupos terroristas, como el antiguo Frente Al Nusra y el Estado Islámico (EI).
El Centro Sirio para la Investigación Política detalló que la guerra civil de Siria ha producido 470 mil muertos, 1,9 millón de heridos y millones de desplazados que actualmente protagonizan la ola migratoria más grande de la historia que sufre Europa. Sin embargo, aún permanecen atrapados más de 250 mil civiles en ciudades sirias tomadas por los terroristas.
Respecto a este punto, este nuevo acuerdo entre Washington y Moscú indicó que la ayuda humanitaria deberá entrar de forma regular a todas las localidades asediadas en Siria. La reducción de la violencia también es una condición para que la oposición siria se reincorpore a las negociaciones de paz auspiciadas por la Organización de Naciones Unidas.
Lavrov, celebró que “a pesar de los problemas, de la desconfianza y de la interferencia, hemos sido capaces de trabajar”. Y, con una mirada a más largo plazo, subrayó que “todo esto crea las condiciones para un regreso al proceso político”.
El encuentro inició el viernes luego de 2 días de reuniones telefónicas entre ambos jefes diplomáticos y se prolongó hasta la madrugada del sábado.
Complicaciones
La aplicación del plan de tregua ruso-estadounidense en Siria no será fácil, a continuación mencionamos 3 puntos conflictivos:
-La desconfianza: el profundo recelo entre el régimen y los rebeldes de la oposición. La alianza de estos con yihadistas considerados “terroristas” que buscan la salida del presidente Bashar Al Asad.
-Ataques coordinados: Washington debe convencer a los grupos rebeldes que son aliados de las formaciones yihadistas que se separen de estas. Para los insurgentes, alejarse de Fateh al Sham “significaría de hecho que van a ceder terreno ante el régimen” y por ello “será muy difícil hacerles cambiar de opinión”, destaca Charles Lister, investigador en el Middle East Institute.
-¿Y los aliados?: Turquía, que apoya a la oposición pero se ha acercado recientemente a Rusia, se felicitó por el anuncio ruso-estadounidense. Pero ¿qué ocurrirá con Arabia Saudí, que apoya a los rebeldes, o con Irán, aliado del presidente Asad? (I)