EE.UU. incluye a Cuba en la lista de países que no colaboran contra el terrorismo
Estados Unidos anunció que incluyó a Cuba en su lista negra de países que no colaboran plenamente en la lucha antiterrorista, una medida que prohíbe vender armas a la isla, alegando la presencia en el país de la guerrilla colombiana del Ejército de Liberación Nacional (ELN). "Este es el primer año en que Cuba ha sido certificada como no totalmente cooperante desde 2015", dijo el Departamento de Estado en un comunicado.
"Cuba es víctima del terrorismo. Hay una larga historia de actos terroristas cometidos por el Gobierno de EE.UU. Contra Cuba", respondió en inglés a través de Twitter el director para Estados Unidos de la Cancillería cubana, Carlos Fernández de Cossío.
La medida podría ser un paso previo para llevar a la inclusión de Cuba en la lista de estados patrocinadores del terrorismo, aunque el Departamento de Estado no se refirió a este extremo. "Citando protocolos de negociación de paz, Cuba rechazó la petición de Colombia de extraditar a diez líderes del ELN que vivían en La Habana después de que el grupo reivindicara el ataque de 2019 contra una academia de policía en Bogotá, que mató a 22 personas e hirió a más de 60", señaló el Departamento de Estado.
Los guerrilleros del ELN viajaron a La Habana en 2017 para sostener conversaciones de paz con el gobierno de Bogotá, pero no han regresado. "La negativa de Cuba a comprometerse productivamente con el gobierno colombiano demuestra que no está cooperando con el trabajo de Estados Unidos para apoyar los esfuerzos de Colombia para garantizar una paz, seguridad y oportunidades justas y duraderas para su pueblo", dijo el Departamento de Estado.
Los guerrilleros han venido pidiendo sin éxito un salvoconducto para que sus negociadores regresen de Cuba. Este país se une así a otros cuatro adversarios estadounidenses -Irán, Siria, Corea del Norte y Venezuela- que no obtuvieron la certificación en 2019 bajo una ley antiterrorista estadounidense que afecta las exportaciones de artículos y servicios de defensa.
La medida del Departamento de Estado tendrá poco efecto práctico en Cuba, que no importa armas de Estados Unidos, su rival desde hace seis décadas, pero se une a la presión diplomática que ejerce el gobierno de Donald Trump sobre el país, después de los esfuerzos de reconciliación de su predecesor, Barack Obama.
El Departamento de Estado también acusó al gobierno comunista de Cuba de albergar a varios prófugos estadounidenses de la justicia buscados por cargos de violencia política. Entre ellos, mencionó a la activista Joanne Chesimard, condenada por matar al policía estatal de Nueva Jersey Werner Foerster en 1973. (I)