Diputados debatirán pago de deuda con 'fondos buitre' en Argentina
El bloque de Diputados oficialista acordó el martes con aliados debatir la semana próxima una ley que permite a Argentina pagar a fondos especulativos (buitres) una multimillonaria deuda en Nueva York, informaron fuentes parlamentarias.
"Habrá oportunidad de realizar modificaciones a la iniciativa y por eso aceptamos emitir dictamen para el tratamiento de la norma", anunció en rueda de prensa el diputado Darío Giustozzi, de un sector opositor pero amigable con el partido del presidente Mauricio Macri.
El presidente Macri, líder de una alianza de centroderecha, ha firmado un principio de entendimiento con poderosos fondos liderados por NML Capital y Aurelius, de pagarles $ 4.653 millones en efectivo, como máximo el 14 de abril.
El juez neoyorquino del caso, Thomas Griesa, puso como condición a Argentina que la ley derogue otra que impide mejorar ofertas a los acreedores. Sólo así levantará la restricción que impuso a un pago a acreedores que habían aceptado una reestructura de las sumas que debían cobrar, lo que provocó un "default" parcial en 2014.
El objetivo de Macri es poner fin a un litigio judicial de 15 años con una parte del 7% de acreedores que se negó a entrar en las reestructuras de 2005 y 2010. Un 93% de bonistas adhirió a los canjes para poner fin al gigantesco "default" de 2001 sobre casi $ 100.000 millones.
En cambio, el diputado kirchnerista y exministro de Economía Axel Kicillof dijo que su bloque se opone porque "hay que cerrar el trato pero en condiciones justas, equitativas". "No se puede pagar a algunos acreedores el 100% de lo que piden", declaró.
El ministro de Economía, Alfonso Prat-Gay, había afirmado al presentar la iniciativa al Congreso que si se extiende el acuerdo "al resto de los bonistas (holdouts) esto significa una emisión de 11.684 millones de dólares en bonos". Argentina colocará los bonos y depositará el dinero "cash" en las cuentas en los fondos.
El diario Financial Times había publicado que la emisión de deuda sería la más grande que tome un país no desarrollado en los últimos 20 años, después de México en 1996. (I)