El estado de Texas, en Estados Unidos, sufrió una de las peores masacres de los últimos años, pues el joven de origen hispano, Salvador Ramos, ingresó armado a  una escuela primaria de la localidad de Uvalde y comenzó a disparar contra todo aquel que se encontraba a su paso. 19 niños y dos maestras fallecieron en el tiroteo. 

La tragedia ocurrió el 24 de mayo del 2022 y, desde entonces, ha surgido nueva información sobre los tensos minutos que atravesaron los sobrevivientes de este suceso. Una de las últimas revelaciones corresponde a la llamada que realizó la niña Khloie Torres, de 10 años, al 9-1-1. La pequeña era la mejor amiga de Amerie Jo Garza, considerada héroe por ser de las primeras en alertar a la Policía de lo que ocurría.  

“No quiero morir, mi maestra está muerta”, decía Torres, en una conversación a la que tuvo acceso el New York Times. “Mi maestra está muerta, por favor manden ayuda, ayuden a mi maestra, le dispararon; pero aún está viva”, exclamó. Siete minutos después volvió a llamar al 911 y dijo que “varios de sus compañeros están muertos. Hay muchos cuerpos”.

Según el medio estadounidense, la sobreviviente permaneció durante 17 minutos en línea. También contó que su maestra las protegió cuando Ramos ingresó al aula para dispararles. 

En una entrevista con el canal KenS5, Torres dijo que la sacaron de clases cubierta de sangre y que la llamada telefónica la hizo desde el móvil de Jo Garza, su mejor amiga.

El Distrito Escolar de Uvalde informó que la escuela Robb Elementary no volverá a abrir sus puertas. Después de la masacre, el establecimiento ya no se usará y probablemente será demolida. 

En ese lugar solamente quedarán las ofrendas y un monumento que haga homenaje a las víctimas de la masacre.