El Ejército mexicano capturó a Noel Salgueiro Nevarez, alías "El Flaco Salgueiro", lugarteniente del líder del cartel de Sinaloa, Joaquín "El Chapo" Guzmán, y responsable de esa organización en el norteño estado de Chihuahua, informaron este miércoles fuentes oficiales.

La detención se realizó ayer en Culiacán, en el noroccidental estado de Sinaloa, en una operación en la que no fue necesario "efectuar ningún disparo", indicó la Secretaría de Defensa Nacional (Sedena) y la Procuraduría General de la República (PGR, fiscalía), que presentaron hoy al detenido en conferencia de prensa.

En un comunicado conjunto, ambas instituciones destacaron que esta captura "afecta la estructura de liderazgo, así como la capacidad operativa" del cartel de Sinaloa -también llamado del Pacífico- en el estado Chihuahua, "afectando inclusive su operación a nivel nacional e internacional".

El arrestado es considerado por las autoridades fundador y líder de Gente Nueva, un grupo delictivo al servicio de la organización que encabeza "El Chapo", uno de los capos más buscados en el país tras su fuga de un penal mexicano en enero de 2001.

Salgueiro Nevarez también es señalado como "presunto responsable de secuestros, extorsiones, torturas y asesinatos de un gran número de personas en el estado de Chihuahua", incluidos funcionarios y dirigentes empresariales.

La PGR ofreció en octubre de 2010 una recompensa de hasta tres millones de pesos (unos 220.000 dólares) a quien proporcionara información que condujera a la localización y detención de este narcotraficante.

Los carteles del narcotráfico de Sinaloa y de Juárez se disputan desde hace varios años el control de Chihuahua, y especialmente de Ciudad Juárez, estratégica para el trasiego de drogas hacia Estados Unidos.

Los de Sinaloa tienen un brazo armado llamado Gente Nueva, para el que trabajan las pandillas Los Artistas Asesinos y Los Mexicles, mientras que los de Juárez tienen a un grupo de choque denominado La Línea, vinculado con la pandilla Los Aztecas, todos involucrados además en el negocio de venta de droga al menudeo.

Esas pandillas suelen reclutar en sus filas a muchos adolescentes como sicarios, por lo que en los enfrentamientos y los ajustes de cuentas entre las organizaciones criminales suelen caer muertos varios jóvenes.