Cuba recibe respaldo internacional por el fin del embargo
Cuba recibió este miércoles 31 de octubre, en la ONU, un claro apoyo de buena parte de la comunidad internacional de cara a la votación de su resolución anual contra el embargo estadounidense, que se aprobará el jueves 1 de noviembre.
Aunque originalmente el voto estaba previsto para este miércoles , la larga lista de intervenciones en el debate previo llevó a la Asamblea General a posponer su pronunciamiento por un día.
El órgano, en el que se sientan los 193 Estados miembros de Naciones Unidas, ha adoptado cada año desde 1992 una resolución no vinculante para pedir el fin del embargo económico, comercial y financiero contra Cuba.
En esta ocasión, y en contra de lo habitual, Estados Unidos planteó una serie de enmiendas al texto en las que se denuncia la situación de las libertades y los derechos humanos en la isla.
Según fuentes diplomáticas, esas modificaciones tienen muy pocas posibilidades de salir adelante y hoy, en general, fueron ignoradas por las delegaciones que tomaron la palabra durante el debate.
Los países que sí las mencionaron, como Venezuela, lo hicieron de forma muy crítica.
"Además de ser una clara muestra de la práctica del régimen imperial de abordar el tema de los derechos humanos desde una perspectiva selectiva, politizada y a partir de dobles raseros, tienen como propósito final desviar la atención del tema central que hoy nos ocupa: el ilegal, criminal, anacrónico y repudiable bloqueo", dijo el representante venezolano, Samuel Moncada.
Mientras tanto, decenas de países y varios grupos regionales adelantaron que, como en ocasiones anteriores, votarán a favor de la resolución presentada por Cuba y reiteraron sus críticas a la actual política estadounidense.
La Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (Celac) destacó que el proceso de normalización de las relaciones iniciado bajo la Administración de Barack Obama abrió "un nuevo capítulo en la historia de la paz y la convivencia entre las naciones americanas".
"Sin embargo, lamentamos que el bloqueo sea todavía una realidad para el pueblo cubano. Es innegable su permanencia como principal obstáculo al normal desarrollo de Cuba", señaló el embajador salvadoreño ante la ONU, Rubén Armando Escalante Hasbún, en nombre del bloque.
Egipto, en representación del Grupo de los 77 más China, insistió en esa idea, lamentando la "nueva política" establecida por la actual Administración estadounidense para "endurecer" el embargo.
El Grupo Africano, representado por Marruecos, defendió que "un fin inmediato del embargo económico contra Cuba es necesario" y que una solución política beneficiará tanto a la isla como a Estados Unidos.
Entre otros, intervinieron en el debate a título nacional varios Estados latinoamericanos, que dejaron clara su oposición al embargo y que pidieron una vuelta al diálogo.
El embajador de Rusia, Vasili Nebenzia, defendió que el llamado bloqueo es una "reliquia de la Guerra Fría" y un "ejemplo de sanciones unilaterales e ilegítimas" que son "contraproducentes".
En la primera jornada del debate, que continuará mañana, no intervinieron países tradicionalmente aliados de Estados Unidos como los de la Unión Europea, Canadá o Australia, que pese a su cercanía con Washington suelen votar a favor de la iniciativa cubana.
La resolución presentada por La Habana expresa preocupación por la continuidad del embargo y por los "efectos negativos" que tiene sobre los cubanos e insta a terminar con ese tipo de medidas.
A priori, el texto saldrá adelante con un apoyo casi unánime en la Asamblea General, como ha venido ocurriendo en ocasiones anteriores.
Hace un año, la resolución recibió 191 votos a favor y los únicos votos en contra de Estados Unidos e Israel.
El canciller cubano, Bruno Rodríguez, estuvo este miércoles presente en el debate de la Asamblea General y tiene previsto pronunciar su discurso mañana, antes de la votación.
Tampoco intervino hoy Estados Unidos, que el jueves tendrá ocasión de defender sus enmiendas, que para las autoridades cubanas no son más que una "maniobra diplomática" para tratar de restar apoyo a su resolución. (I)