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Cuba no renunciará "ni un milímetro" en sus principios por acercarse a EE.UU., afirma canciller Rodríguez
El canciller de Cuba, Bruno Rodríguez, calificó como "extrordinariamente oportuna" la reflexión del líder de la revolución y expresidente de Cuba, Fidel Castro, sobre la reciente visita del mandatario estadounidense, Barack Obama, a La Habana y la visión de este sobre la política isleña, y reiteró que el acercamiento de ambos gobiernos no implica renunciar a los principios de la revolución.
En el artículo "El hermano Obama, difundido por el diario Granma, entre otras cosas, Fidel Castro, retirado del poder desde 2006, dijo que Cuba no necesita que el imperio le regale nada y le pidió que reflexione y no trate de elaborar teorías sobre la política cubana.
“Me parece extraordinariamente oportuna la reflexión del comandante Fidel Castro con su extraordinaria autoridad histórica, política y ética en nuestro pueblo y, en general, en la opinión pública internacional cuando descompone esos conceptos y reitera lo que es una firme decisión de las cubanas y cubanos”, dijo el jefe de la diplomacia cubana en una entrevista con los medios públicos de Ecuador y que será transmitida este martes a las 08.15.
“Antes de que llegara el presidente Barack Obama a La Habana, décadas antes, los cubanos habíamos decidido nuestro propio rumbo, habíamos escogido nuestro destino. Se había hecho una revolución en Cuba que fue objeto de agresiones, incluso militares, de terrorismo de estado, de un bloqueo criminal”, anotó Rodríguez.
Por eso, el canciller cubano sostuvo que “en modo alguno, nuestro pueblo podría recibir al presidente Obama como el Mesías que nos anunciaría nuestro futuro, que podría ofrecernos recetas para dar el poder a nuestro pueblo, que lo conquistó hace muchos años, por los que asumió los mayores riesgos, incluso de holocausto nuclear”.
Sobre las reflexiones de Fidel Castro, el diplomático sostiene que estas reiteran lo que es la disposición de los cubanos, a los que llamó ciudadanos instruidos, de construir una relación totalmente nueva, como no existió nunca antes con los Estados Unidos sobre la base del respeto a la independencia y la autodeterminación, de respeto mutuo, igualdad soberana y reciprocidad.
“Los cubanos seguimos estando muy conscientes, como argumenta el comandante, de nuestras enormes diferencias con el gobierno de los Estados Unidos y de que nosotros construimos un modelo que es totalmente distinto, que es alternativo al del imperialismo norteamericano”, recalcó.
Reiteró que Cuba tiene la predisposición de construir una relación históricamente distinta, de diálogo y cooperación, dentro del reconocimiento de las profundas diferencias entre los dos países, de convivencia civil, “que no significa, en lo absoluto, la renuncia ni un milímetro a los principios de la revolución cubana ni la menor sombra a nuestra independencia”.
Bloqueo y Guantánamo
Por otro lado, Rodríguez hizo énfasis en que no puede haber relaciones normales entre Estados Unidos y Cuba, principalmente porque el bloqueo comercial y financiero, impuesto por Estados Unidos desde octubre de 1960, persiste.
Reconoció las decisiones de carácter ejecutivo que ha tomado el presidente Obama, desde que se anunció el proceso de normalización de las relaciones diplomáticas, que modifican la aplicación práctica del bloqueo, sin embargo, dijo que esta medida “sigue siendo una realidad asfixiante”.
En este contexto, dijo que la medida anunciada por Obama antes de su llegada a Cuba, sobre la autorización a la isla para el uso del dólar en sus transacciones financieras internacionales no ha pasado de ser un mero anuncio.
“Puedo afirmar que en este momento no hay transacciones financieras normales. Los bancos cubanos, aun en estas nuevas regulaciones siguen impedidos de abrir cuentas en bancos estadounidenses. De manera que habrá que dejar el beneficio de la duda, pero puedo decir que el bloque sigue siendo una realidad cotidiana y sigue siendo -después de que Obama regresó a Estados Unidos- el principal impedimento a nuestro desarrollo económico y la causa esencial de privaciones a todas las familias cubanas”, subrayó.
También, se refirió a la ocupación estadounidense de la base naval de Guantánamo como otro impedimento para unas relaciones normales entre Cuba y Estados Unidos.
“No podría pensarse en relaciones normales entre los Estados Unidos y Cuba mientras se usurpe a nuestro pueblo el territorio en Guantánamo que ocupa una base naval, que tiene una existencia totalmente ilegal, contra la voluntad de nuestro pueblo”, dijo el canciller Rodríguez.
Otros aspectos que cuestionó son los programas de “apoyo a la democracia”, financiados por Washington que buscan la alteración del orden constitucional en la isla, transmisiones ilegales de radio, de carácter hostil, desde territorio estadounidense que violan la soberanía del espacio radioeléctrico de Cuba, la falta de compensación a las víctimas del terrorismo de estado propiciado por Estados Unidos.
En la entrevista con los medios públicos, el canciller Rodríguez se refirió también a la campaña para la elección presidencial de Estados Unidos a la que tildó de banal, agresiva y falta de ideas y en las que se trata a los electores como meros consumidores. (I)