Cristina Fernández registra una evolución favorable, tras cirugía
La presidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner recibió ayer el alta neurológica y neuroquirúrgica, después de someterse a una serie de estudios en la Fundación Favaloro, donde había sido operada de un hematoma craneal el 8 de octubre pasado.
“Debido a la favorable evolución posoperatoria que ha presentado la señora presidenta, y a que han sido satisfactorios los resultados obtenidos en la nueva neuroimagen de control que se le ha realizado, junto a la normalidad de los resultados de los estudios de laboratorio realizados, se ha decidido otorgarle el alta neurológica y neuroquirúrgica”, señala el parte médico.
De esa manera se pone fin a 30 días de incertidumbre y especulaciones –en especial en ámbitos de la oposición política y mediática nacional- sobre la salud de la mandataria, que deberá retomar de a poco sus actividades ejecutivas.
En un principio atendería sus labores desde la residencia presidencial de Olivos, donde permaneció el último mes en reposo absoluto, sin siquiera leer el diario en las primeras semanas.
Los médicos le recomendaron no viajar en avión ni en helicóptero por los próximos 30 días. La mandataria se dirigía habitualmente a la Casa Rosada, sede de gobierno, en el helicóptero presidencial para evitar el intenso tráfico entre la periferia norte de la capital, donde se halla la residencia presidencial, y la sede de gobierno, ubicada en pleno centro de Buenos Aires.
Por ello, se descuenta que –al menos en un principio- atienda los asuntos de Estado en Olivos. La agenda y modalidad de trabajo se decidirá a lo largo de la semana.
La evolución favorable del cuadro posoperatorio de la presidenta fue anunciada por el secretario de Comunicación Pública, Alfredo Scoccimaro. Según el reporte oficial, a Cristina Kirchner le colocaron un Holter para evaluar este fin de semana su condición cardíaca, en especial por una arritmia detectada en un control previo a su operación.
Según el resultado del Holter, “el lunes (mañana) se evaluará el ritmo de regreso a las tareas habituales”, agrega el parte médico. En un mes deberá realizarse una nueva imagen neurológica de control.
La presidenta se sometió a una tomografía computada el viernes por la noche en la Fundación Favaloro, donde el 8 de octubre fue operada con éxito por un equipo médico interdisciplinario del que formó parte el anestesiólogo ecuatoriano Luis Valdivieso.
La presidenta, por recomendación médica, deberá evitar situaciones de estrés. En el último mes recibió de un especialista, el neurocirujano Facundo Manes, un programa especial para cambiar hábitos perniciosos para su salud. En fuentes del oficialismo se especula que la presidente podría reaparecer en público, en una fecha aún no confirmada, en la inauguración de una fábrica de electrodomésticos de la empresa Siam, una marca argentina emblemática, en la ciudad de Avellaneda, sur del Gran Buenos Aires.