Buenos Aires.- La economía argentina sigue creciendo y mejoran los índices de empleo y consumo, pero el gobierno de Cristina de Kirchner no ha logrado dominar una elevada inflación que puede impactar en las elecciones legislativas del domingo, en las que se renovará la mitad de los miembros de la Cámara de Diputados (127) y un tercio de los del Senado (24), según analistas.

La elevada inflación, de 25% anual según datos privados y de más del 10% según el cuestionado indicador oficial es, de acuerdo a los sondeos, una de las mayores preocupaciones de los argentinos. “El gobierno deberá enfrentar la distorsión que existe en materia de precios relativos, que se agrava con la presencia de una tasa de inflación instalada bien por encima del 20% anual”, dijo Dante Sica, director de la consultora abeceb.com.

El tema cambiario también presenta nubarrones en el horizonte del final de mandato en 2015 de un ciclo que comenzó en 2003 con la asunción del fallecido presidente y esposo de la mandataria, Néstor Kirchner (2003/2007).

La mandataria gobernó con las mismas coordenadas de su antecesor, muerto en 2010 por un paro cardíaco, aunque el período de su esposo se caracterizó por un vigoroso crecimiento, que languideció desde la crisis global de 2008. “Entendemos que el gobierno adoptará medidas para evitar consecuencias negativas desde el punto de vista cambiario después de octubre y, fundamentalmente acelerará la tasa de devaluación del peso”, dijo el analista Juan Paladino.

Paladino advirtió que el país “está perdiendo reservas a ritmo acelerado y estamos aislados del sistema financiero (tras el default de 2001). El campo aporta dólares, pero se pierden en pagos de la deuda y la importación de combustibles”.

Pese a señalar las luces rojas que acecharán en estos dos años a Kirchner, actualmente convaleciente de una cirugía en la cabeza y con reposo absoluto, los analistas reconocen aciertos de su gobierno. “Los canjes de deuda y el crecimiento económico permitieron reducir notablemente el peso de la deuda pública que hoy representa el 38% del PIB, cuando en 2003 llegó a representar el 140%”, señaló Sica.

Argentina reestructuró en la última década su deuda en default por $ 100.000 millones, la más grande de la historia en el mundo, con una adhesión del 93% de los acreedores. Sin embargo, el 7% de los acreedores restantes, llamados fondos buitre, están litigando en Nueva York para obtener el pago del 100% de los bonos. “El kirchnerismo pudo sostener más de 10 años consecutivos sin una crisis destructiva y sobre el final del periodo es bajísimo el endeudamiento en dólares”, dijo Paladino.

Kirchner impuso como agenda de política económica la preservación del empleo y el fomento del consumo interno y “a mi entender deja un mejor punto de partida para el gobierno siguiente”, enfatizó.    

De este modo, los analistas avizoran que las gestiones del gobierno tendrán su impacto en las elecciones del 27 de octubre, en las que el primer candidato a diputado nacional del opositor Frente Renovador, Sergio Massa, mantiene una diferencia de 8 puntos en la intención de voto de los bonaerenses sobre el postulante del oficialista Frente para la Victoria, Martín Insaurralde.