La Corte Suprema de EE.UU. falla contra la discriminación laboral de los transexuales
"Hoy tenemos que decidir si un empleador puede despedir a alguien solo porque es homosexual o transgénero: la respuesta es clara", la ley "lo prohíbe", dijo el máximo tribunal estadounidense este lunes 15 de junio del 2020 en un fallo decidido por una mayoría de seis jueces de los nueve que lo conforman.
La Corte Suprema de Estados Unidos otorgó así la mayor victoria a las minorías sexuales desde el reconocimiento del matrimonio homosexual en 2015.
El Título VII de la Ley de Derechos Civiles de 1964 prohibía la discriminación "por razones de género", pero ciertos tribunales, así como la administración del presidente republicano Donald Trump, consideraban que era aplicable únicamente a la distinción entre hombres y mujeres, y no a las minorías sexuales.
Los defensores de los empleados homosexuales, lesbianas o transgénero, apoyados por muchos legisladores o ejecutivos demócratas y varias grandes empresas como Apple, General Motors o Walt Disney, pidieron a la Corte que aclarara quiénes estaban protegidos por esta norma.
Casos concretos
Una de las personas que forzó al Tribunal Supremo a pronunciarse fue Aimee Stephens, que en 2013 fue despedida de la funeraria de Michigan que dirigía después de comunicar a sus superiores que iba a iniciar el proceso de transición para dejar de ser fisiológicamente un hombre y convertirse en mujer. Stephens murió en mayo, por lo que su viuda, Donna, fue la que recibió hoy el resultado del litigio.
El Tribunal Supremo también se posicionó en otros dos casos: el de Gerald Bostock, quien fue despedido después de que se uniera a una liga de softball que simpatizaba con las personas LGTBIQ, y Donald Zarda, que fue obligado a dejar su puesto de instructor de paracaidismo tras revelar que era gay.
El fallo más importante desde el reconocimiento del matrimonio homosexual
En 2015, el máximo tribunal había ampliado el derecho al matrimonio entre personas del mismo sexo, pero los defensores de las minorías sexuales temían que los dos jueces nombrados por Trump desde su elección hubieran hecho a la corte virar hacia posturas más conservadoras. Sin embargo, fue uno de ellos, Neil Gorsuch, quien redactó la decisión mayoritaria, agregando su voz a la de los cuatro jueces progresistas y al jefe de la corte John Roberts.
Hasta ahora, solo una veintena de los 50 estados del país, además de la capital estadounidense, tenían leyes para proteger a los transexuales; por lo que la discriminación contra ese colectivo seguía siendo en teoría legal en el resto del país. (I)