Colombia marchó por la paz y las víctimas del conflicto armado
A distintas horas, miles de colombianos marcharon en la Gran Movilización por la Paz, como un homenaje a los desaparecidos y las víctimas del conflicto.
Desde las 10:00 y hasta la tarde del sábado en las principales ciudades del país cientos de familias salieron a las calles, arropadas por las autoridades y organismos sociales.
En medio de los tumultos sobresalieron madres de familias que perdieron a sus hijos en el conflicto o están desaparecidos, así como miles de personas desplazadas de sus lugares de origen por la violencia.
En Bogotá, la primera ciudad en manifestarse desde las 10 de la mañana, el presidente Juan Manuel Santos, rodeado de cientos de personas, aprovechó la ocasión para plantar árboles en memoria de las víctimas del conflicto.
Santos invitó s a los colombianos a sembrar árboles y sembrar vida, luego de plantar varios en el jardín de la Casa de Nariño, en el marco del Día Nacional de la Memoria y Solidaridad con las Víctimas del Conflicto.
“Haremos de Colombia un verdadero bosque de vida y lo haremos por nuestras víctimas”, expresó el mandatario, acompañado además por varios ministros y víctimas del conflicto armado.
Esta manera de honrar la memoria de las víctimas empezó en la plazoleta Galán, frente a la sede presidencial, con la siembra de 20 árboles, 18 de ellos arrayanes.
“Hemos decidido a partir de hoy rendir tributo a las víctimas con un símbolo muy poderoso, que creemos que debe convertirse en un procedimiento normal, regular, en este país: sembrar árboles para sembrar vida”, dijo Santos.
Indicó que se sembrarán árboles en cada lugar que visiten, como funcionarios y como ciudadanos. El presidente Santos comentó que los arrayanes son muy resistentes, “como han sido las víctimas en este país”.
En el Caribe
A casi 900 kilómetros de la capital colombiana, la Unidad de Restitución de Tierras (URT) reunió a más de 700 campesinos, de los municipios de la zona norte y la subregión de los Montes de María, en el municipio de San Juan Nepomuceno, para conmemorar el Día Nacional de la Memoria y la Solidaridad con las Víctimas.
En Barranquilla, a los gritos de ¡Viva la paz! líderes de varios departamentos de la región Caribe participaron en la marcha.
El gobernador del Atlántico, José Antonio Segebre participó en la marcha y habló de la necesidad de ponerle fin al conflicto armado en Colombia para lograr un país con verdadera justicia social.
“La mayor justicia que los colombianos podemos darle a nuestros hijos y a los hijos de nuestros hijos es hacer la paz. Esa es la verdadera justica, porque por más de 50 años se ha venido afectado al país con el conflicto, entonces no podemos negarnos a la posibilidad de vivir como pueblo civilizado. Hay que hacer la paz para que Colombia progrese”, expresó el mandatario.
Por su parte, Nicolás Petro, hijo del ex alcalde de Bogotá, Gustavo Petro dijo que “la gente le está cumpliendo a la paz tanto aquí en Barranquilla como en toda Colombia. (…)Barranquilla no es una ciudad que se moviliza de esta manera y ya tenemos unos 5 mil asistentes y esperamos más, creemos que vamos a llenar la plaza de la Paz”, expresó.
“Con esta marcha queremos invitar a que se el proceso de paz que adelanta con las Farc se dé también con el ELN y se trate de buscar una paz con justicia social”, expresó Jesús Tovar, defensor de derechos humanos.
Miembros del resguardo indígena guajiro participaron en la marcha de apoyo al proceso de paz con su danza tradicional de Yonna.
Los indígenas viajaron 7 horas y en medio del baile tradicional gritan "se vive se siente, La Guajira está presente".
Asimismo, la Organización Indígena de La Guajira - Yanama convocó la movilización indígena por la paz en Riohacha, la cual salió hacia las nueve de la mañana desde el parque de La India y que inició con el toque de la Kasha, instrumento tradicional wayuu. (I)