El científico y profesor universitario Mustafá Ahmadi Roshan, que trabajaba en la planta nuclear de Natanz (centro), la mayor de Irán, falleció este miércoles al explotar una bomba adosada a su coche en el norte de Teherán. 

Según los medios locales, el artefacto explosivo fue colocado en el vehículo por un individuo que viajaba en una motocicleta y la explosión, en el barrio de Seyed Khandan, cercano a la universidad Allameh Tabatabi.

Otras dos personas acompañaban al científico. Una de ellas fue identificada como el conductor del automóvil, quien horas después murió en un centro sanitario, mientras la otra, aún no identificada, permanece herido.

El atentado contra Roshan, de 32 años, es el último de una serie de ataques perpetrados en los dos últimos años en los que han muerto prominentes científicos iraníes, supuestamente vinculados al controvertido programa nuclear del régimen, que acusa a Israel de estar detrás de estos asesinatos.

Tras conocer la noticia, diputados iraníes condenaron el ataque y gritaron consignas como "muerte a Estados Unidos", "muerte a Israel" y "muerte a los hipócritas", informó la agencia iraní RNA.

La planta de Natanz, en la provincia de Isfahan, es la instalación principal de enriquecimiento de uranio del país, con unas 8.000 centrifugadoras y el lugar donde el régimen pretende producir combustible atómico de forma industrial.

El atentado se produce en un momento de especial tensión internacional por el programa nuclear iraní, después de que el pasado lunes el OIEA confirmase que Irán había comenzado la producción de uranio enriquecido al 20 por ciento en su nueva planta de Fordo, a 160 kilómetros de Teherán.

Gran parte de la comunidad internacional, con Estados Unidos e Israel a la cabeza, acusan al régimen iraní de ocultar, bajo su programa civil, otro de naturaleza clandestina y ambiciones bélicas cuyo objetivo sería producir armas atómicas, lo que Teherán ha negado en reiteradas ocasiones.

Asesinato no parará pogreso iraní

Las autoridades iraníes acusaron del atentado a "agentes de los poderes arrogantes y del régimen sionista", en alusión a EEUU e Israel. Además, dejaron en claro que no detendrán su programa nuclear.

"Los enemigos deben saber que no serán capaces de impedir que la nación iraní alcance sus objetivos en los campos científicos", expresó el vicepresidente iraní, Mohamed Reza Rahimi.

"Los que se dicen defensores del antiterrorismo atacan a los científicos iraníes", pero deben saber que, a su pesar, éstos "están más resueltos que nunca a avanzar en las aspiraciones de la República Islámica", añadió.

"Israel es responsable de este atentado, el método se parece al utilizado en los atentados contra los científicos nucleares iraníes", declaró el vicegobernador Safal Ali Baratloo.