Al menos nueve personas murieron  y 212 resultaron heridas  en un choque  que involucró a dos trenes y un autobús en un paso a nivel del barrio   de Flores, al sudoeste en la capital argentina.

El accidente ferroviario, el más grave de las últimas décadas en Buenos Aires, según  fuentes policiales y de salud, se  registró  en las primeras horas de la mañana, cuando un tren que ingresaba a la estación de Flores, en el centro geográfico de la capital argentina, arrolló a un colectivo repleto de pasajeros que al parecer pasó por alto las barreras, apuntaron. La Policía señaló, sin embargo, que esta versión debe ser verificada.

El siniestro, que se produjo a las 07:00 local cuando centenares de miles de personas se trasladan en el transporte público para iniciar la jornada laboral, ocurrió   en la línea Sarmiento de ferrocarril que une la estación Once, en el centro de Buenos Aires, con la poblada periferia oeste.

El bus  de la línea 92 quedó aplastado al ser arrastrado por el convoy, que descarriló y embistió a otro que estaba parado en la estación, agregaron las autoridades.

“Un tren que estaba ingresando a la estación de Flores, proveniente de Once, arrolló a un colectivo de la línea 92, lo arrastró y lo incrustó contra el andén”, reiteró Gustavo Gago, gerente de Relaciones Institucionales de la empresa Trenes de Buenos Aires (TBA).

El conductor del tren siniestrado fue rescatado de la cabina con fracturas en sus piernas y “está fuera de peligro”, informó el director del SAME. “Fueron difíciles las tareas de rescate y traslado de víctimas porque el autobús quedó destrozado y varios vagones quedaron uno encima del otro”, resaltó.

Horas después del accidente, aún permanecen hospitalizados 29 heridos, siete de gravedad, indicaron fuentes policiales al informar de dos muertos que se suman a los siete reportados en un primer momento.  Los heridos fueron trasladados a cuatro hospitales de la capital argentina, que se declararon en alerta roja.

Los bomberos rescataron al conductor del tren y buscaron otras víctimas en el  colectivo y el tren siniestrado, explicó el comisario Omar Bravo. “Es uno de los accidentes más tristes y graves de los últimos años”,  agregó.

El maquinista de uno de los dos trenes, Alberto Carbonelli, cuyas piernas  quedaron atrapadas entre los hierros, fue el último en ser rescatado y luego trasladado lúcido en helicóptero hasta el hospital Alvarez, donde era intervenido   quirúrgicamente, afirmó la directora del centro, Diana Galimberti.

Bravo dijo que una mujer y su bebé de dos años se salvaron de milagro y fueron rescatados rápidamente y que entre los heridos hay personas que estaban en el andén.

“El autobús cruzó el paso a nivel cuando las barreras estaban bajas, pero vamos a esperar los resultados de las pericias y las grabaciones para determinar si eso fue así”, indicó el portavoz de la empresa ferroviaria Trenes de Buenos Aires (TBA), Gustavo Gago, a emisoras de radio. “Se trataría de una actitud temeraria e imprudente del chofer”, apuntó.

Varios testigos aseguraron también  a radios y canales de televisión que el bus cruzó el paso a nivel con las barreras bajas, mientras que otros dijeron que las barreras no funcionaban normalmente.

El último accidente ferroviario en Argentina   ocurrió el 16 de febrero pasado, cuando el choque de dos trenes en la localidad bonaerense de San Miguel causó cuatro muertos y unos 40 heridos, mientras que la tragedia ferroviaria más grave de la historia en Argentina fue en 1970, en la periferia noroeste de Buenos Aires, con un saldo de 200 muertos.