China implementará la estrategia para expandir la demanda interna que impulse el consumo y una reforma estructural de la oferta, dijo el presidente Xi Jinping este 16 de octubre, ante 1000 asistentes al Informe ante el XX Congreso del Partido Comunista, máximo  órgano de gobierno. Con esto el gigante asiático busca impulsar dinamismo a la economía nacional y confianza a la economía global, cuyo motor depende en gran medida de su salud productiva.

La productividad en  las cadenas industriales y de suministro promover  el desarrollo urbano-rural  acorde a  la producción económica. Se harán esfuerzos para construir una economía de mercado socialista de alto nivel, dijo Xi, insistiendo en lo que él llama “el socialismo con peculiaridades chinas, de la nueva era”.

China creció más del 5% del PIB (Producto Interno Bruto) en lo que va del 2022, cifra récord según algunos analistas internacionales, a pesar de los efectos pos pandemia y las restricciones, por lo que sigue como la segunda economía mundial con más del 18,5% del aparato productivo de bienes y servicios. Xi destacó además las relaciones comerciales con 140 países entre ellos Ecuador, con m-as de 4000 millones de USD de compras de nuestra exportación.

Según Xi, el país seguirá priorizando el desarrollo agrícola y rural, ampliando los logros en el alivio de la pobreza y reforzará las bases para la seguridad alimentaria, además  implementará y  promoverá una apertura de alto nivel. China pretende en la nueva era “expandir  la apertura con respecto a las reglas, regulaciones, gestión y estándares, acelerará la transformación en un comerciante de calidad y promoverá el desarrollo de alta calidad de la “Iniciativa de la Franja y la Ruta”.

"Para construir un país socialista moderno en todos los aspectos, debemos, ante todo, buscar un desarrollo de alta calidad", dijo Xi en un informe en la sesión inaugural del XX Congreso Nacional del Partido Comunista de China.

Sobre la política 0 tolerancia al COVD19 Xi insistió que las medidas y políticas, salvaron millones de vidas y aunque pudieron incomodar a muchos, era necesario para salvar “la Patria”, aunque no develó si habrá cambios o relajamiento de las medidas como la cuarentenas cuando se presenten casos positivos.

No hizo cita de la actual crisis económica  provocada por la guerra en Ucrania, ni la tensa relación con los Estados Unidos, que no pasa por su mejor momento desde la vuelta a las relaciones en la década de los 70, pero si fue enfático en decir que “China es una sola y combatirá firmemente las actividades secesionistas y la intromisión de fuerzas extranjeras”.

Sobre la corrupción Xi advirtió que el Partido no tolerará ninguna semilla de corrupción y que esas prácticas deshonestas no son propias del espíritu socialista y del pueblo chino, recordando así los sonados casos de corrupción de las cargos del gobierno que fueron duramente castigados con penas de decenas de años de prisión e incluso penas de muerte que fueron condonadas por cárcel.

Finalmente recordó la misión de fortalecer la promoción de la cultura y difundir la influencia de la “civilización china” por todo el mundo y que se entienda su filosofía de vida, en valores y principios.