Capa de ozono del Ártico sorprendió a los científicos
El Polo Norte registró un fenómeno natural único y asombroso que no había ocurrido antes en esa zona del planeta. Un agujero en la capa de ozono se formó sobre el Ártico, pero curiosamente se volvió a cerrar.
Este suceso inició el 6 de abril, cuando los científicos del Servicio de Monitoreo Atmosférico Copérnico (CAMS por sus siglas en inglés) detectaron un hueco a 18 kilómetros de altura provocado por las frías temperaturas. Los expertos se asombraron al ver la formación del agujero en una temporada poco común (primavera) y de una magnitud, o tamaño tan grande, que no es normal ver en ese polo.
Este vórtex polar, como se los conoce, era más fuerte y duradero que los del hemisferio sur, donde cada 35 años se forma uno. En el Polo Sur se provocan por la presencia humana, al desprenderse químicos, como la clorina y bromina, que al subir a la estratósfera abren la capa de ozono.
The unprecedented 2020 northern hemisphere #OzoneHole has come to an end. The #PolarVortex split, allowing #ozone-rich air into the Arctic, closely matching last week's forecast from the #CopernicusAtmosphere Monitoring Service.
— Copernicus ECMWF (@CopernicusECMWF) April 23, 2020
More on the NH Ozone hole➡️https://t.co/Nf6AfjaYRi pic.twitter.com/qVPu70ycn4
El Polo Norte es desolado, por lo que en esta ocasión se trató del gélido clima que agujereó la estratósfera debido al calor de las zonas circundantes. El CAMS y la NASA monitoreaban a este efecto natural hasta el fin de semana, cuando el agujeró se cerró.
Según los científicos, el vórtice no se reabrirá aunque reciba más carga energética en los siguientes días. De todas maneras, el cambio climático fue el factor para provocar la abertura en la capa y no el aislamiento que vive el mundo por la pandemia del coronavirus.
El Polo Norte es una zona del planeta con poca actividad humana que no se ha visto alterada por la disminución de contaminación y presencia de seres humanos. (I)